José Miguel Villarroya, historiador, mantiene que la llamada entre Putin y Trump confirmó que las posturas entre Rusia y Ucrania siguen siendo irreconciliables y que el presidente de EEUU, presionado por su promesa electoral y el riesgo de colapso del frente ucraniano, busca un acuerdo rápido. "Si EE. UU. deja de apoyar militarmente a Ucrania, el ejército colapsará", advierte, subrayando que la inteligencia militar estadounidense es clave para sostener la resistencia ucraniana. Defiende que "Trump sabe que Ucrania está a punto de colapsar y Rusia va a avanzar mucho más".
Villarroya también señala que una retirada completa de Washington abriría una nueva etapa de negociaciones directas entre EE. UU. y Rusia, dejando a Europa en un papel secundario e ineficaz. Además, cuestiona la efectividad de las sanciones europeas a Rusia, calificándolas de "bumerang" que empobrecen a la población europea sin debilitar realmente a Moscú. Así mismo, cree que si EE. UU. prioriza retomar relaciones comerciales con Rusia, será esta última quien controle los recursos clave de Ucrania, dejando sin valor los acuerdos previos firmados con Kiev.
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