7 marzo, 2018
Por Alfredo Silletta.
Un presidente alterado, nervioso y agresivo se advirtió en la reunión de gabinete de ayer. Maltrato a todos, felicitó al ministro Cabrera por agredir a los empresarios y le echó la culpa de todo a ex secretario de Comercio Guillermo Moreno, días después que la Justicia reconoció que el INDEC no había sido manipulado. “Algunos empresarios argentinos se merecen un Moreno” y agregó: “Moreno les rompió la cabeza a muchos de estos tipos” al frenar las importaciones y favorecer las empresas locales que no saben competir.
En realidad el problema de presidente no es Moreno, ni Cristina Kirchner sino que la economía no arranca luego de dos años, con una inflación imparable donde las metas del 15% no se la cree nadie y las consultoras amigas reconocen que superará el 20% este año, por lo cual su reelección en 2019 se le hace cada vez más difícil si sigue cayendo en las encuestas.
“No sabemos que hacer”, reconoce Dujovne para frenar la inflación y controlar el dólar. Ayer se supo que los contratos de dólar futuro que se negocian en Rofex se están vendiendo a 24,17 pesos para fin de año, un número que el mercado decidió que deberá valer la moneda estadounidense, de allí que será muy difícil frenarla si el gobierno no sale a vender dólares del Banco Central, algo que se opone su presidente Federico Sturzenegger.
Los nervios del presidente se deben en parte a la histeria que se vive en la Jefatura de Gabinete en manos de Marcos Peña al observar que Macri cae en las encuestas y eso habilitaría a que la gobernadora María Eugenia Vidal sea la candidata de Cambiemos. Desde la Gobernación mantienen silencio pero lentamente se nota que ya “trabajan” con esa meta.
Por estas horas, la gobernadora arranca con una agenda de encuentros locales e internacionales para potenciar su imagen de líder nacional. La próxima semana recibirá en La Plata a la presidenta de Croacia, Kolinda Grabar-Kitarovic. La idea es armarle para las próximas semanas reuniones con figuras internaciones, especialmente mujeres, para salir de la agenda de la cloaca, el agua o el conflicto docente.
Más allá del “silencio stampa” que ordenó la gobernadora sobre el 2019, su equipo de trabajo, a cargos de Federico Salvai, trabaja en ese objetivo. El argumento es simple: Mauricio está degastado luego de ocho años en la Capital Federal y dos como presidente. Además reconocen que ocho años en la Provincia es peligroso por ser un territorio difícil y correr el riesgo de todos los gobernadores anteriores que aspiraron llegar a la Casa Rosada y se quedaron en la puerta como Cafiero, Duhalde, Ruckauf, Sola y Scioli.
La pelea recién comienza en Cambiemos, mientras tanto todo aumenta.
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https://info135.com.ar/2018/03/07/un-macri-al-borde-de-un-ataque-de-ira-porque-se-cae-su-reeleccion/
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