Juan José Salinas
28/02/2019
En un histórico discurso, Cristina puso las cosas en su lugar: Marcelo D’Alessio no es un simple aventurero bocón, sino un miembro orgánico o inorgánico de las agencias de inteligencia y seguridad de los Estados Unidos y se movió durante años con el respaldo de la Embajada de ese país en Buenos Aires (¿Hay alguién que pueda creer que se haya movido durante años ostentado chapas y carnets de la NSA y la DEA sin tener que afrontar ninguna consecuencia?) que, por cierto, no negó la legitimidad de dichas acreditaciones. Añadió Cristina que como es flagrante la intervención de una potencia extranjera en los asuntos internos de una justicia local que ha “enriquecido” el lawfare impulsado por el Norte con extorsiones, chantajes y exacciones millonarias, le corresponde inequívocamente investigar esos delitos a la Corte Suprema.
Dentro de una semana, el todavía fiscal (hoy por la mañana, hasta el hiperoficialista Longobardi opinó que debía dejar la causa de las fotocopias de los fantasmagóricos cuadernos) Stornelli será indagado por el juez Ramos Padilla, quien seguramente ante la abundancia de pruebas de su prevaricación, lo procesará.
El discurso de Cristina fue breve y restallante, como un latigazo en el rostro de la hipocresía de un cuerpo que dejó que se violaran sus domicilios, pudiendo haberlo evitado. Fue impecable, incontestable y merece largamente ser escuchado en su totalidad.
VIDEO: Cuestión de privilegio en la sesión del 27 de febrero de 2019
(Abajo, tuits del periodista Juan Alonso)
Dice Juan Alonso: Urgente: D’Alessio tenía documentación de inteligencia en su casa en inglés y en castellano. Hay material que lleva el sello de EE.UU. Además de filmaciones de personas que eran su objetivo, entre ellas, un ciudadano peruano que era buscado por el fiscal Stornelli. El peruano que buscaba desesperadamente Stornelli es el que D’Alessio en los audios dice que cambió los dólares del Bolso de Lopez por dólares falsos. Stornelli, ex jefe de seguridad de Boca. Recordar que (al menos parte de) la guita era de uno de la comisión directiva de Boca que le había vendido su financiera a Cristóbal Lopez. (Se la vendió después de haber entregado los dólares, pero los medios dijeron que la guita provenía del banco de Cristóbal).
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