Los comicios se
dirimirán entre Nicolás Maduro y Henrique Capriles, símbolos de la continuidad
y la antinomia del modelo que dejó el líder bolivariano. Cómo opera su legado y
la perspectiva para hoy.
Por:
Ammiel Elia
Ammiel Elia
Henrique Capriles,
Hugo Chávez y Nicolás Maduro. Fotomontaje: Diego Pintos.
Luego de que el
chavismo arrasara con el 55,7 por ciento de los votos el 7 de octubre pasado,
la muerte de Hugo Chávez dejó acéfala a la “revolución bolivariana”. Hoy los
venezolanos pondrán a prueba su continuidad en las urnas con Nicolás Maduro
como candidato heredero.
La estrategia de
Maduro, a quien el propio Chávez señaló como su continuador político, se
caracterizó por una creciente y visible intención de emular lo más
idénticamente posible el discurso del ex comandante.
Como señaló a INFOnews el
director de investigación de la consultora International Consulting Services
(ICS), Lorenzo Martínez, “Maduro trató de asumir todo lo que es la parte
simbólica, el programa de gobierno y venderse como líder de Chávez”.
Sin embargo, y tal
como lo “dejó en claro más de una vez, él no es Chávez” y esto se vio reflejado
en las encuestas: su intención de voto cayó en dos puntos porcentuales desde el
5 de mayo, fecha en que murió Chávez, según datos de la ICS.
De cualquier manera,
ante la pregunta “¿por quién votaría usted si las elecciones fueran hoy?”, un
56% de las 1600 personas encuestadas en 21 de los 24 estados respondió que
elegiría al candidato chavista. La pregunta fue realizada durante la segunda
semana de abril. Mientras que un 41% elegiría por el opositor, Henrique
Capriles Radonski.
"La oposición
no está votando por un proyecto, ni por un candidato, sino en contra el modelo
que Chávez llevó adelante"
Esta diferencia,
según señaló Martínez, “es irreversible”, dado que en las últimas tres semanas,
la intención de voto de Capriles sólo creció un 0,6%.
A pesar de su
muerte, Hugo Chávez continúa operando como figura central en la coyuntura y el
futuro político de Venezuela, al punto que “ambos candidatos están manejando el
aspecto simbólico, viendo cómo sacar provecho del chavismo, de ese legado que
dejó” el comandante, apuntó Martínez. Aunque señaló que la estrategia “ha
calado más en el oficialismo que en la oposición”.
“La oposición tiene
una estrategia forzada ante la ausencia de un programa de gobierno y ha asumido
el uso de la simbología chavista, de los valores patrios, del ideario
bolivariano, inician todos los eventos de campaña cantando el himno nacional,
cosa que antes no sucedía, y esto es visto como una estrategia forzada que ha
afectado la candidatura de Henrique Capriles”, aseguró Martínez.
Con este escenario y
una sociedad fuertemente polarizada, el director de investigación de ICS
aseguró que “la oposición no está votando por un proyecto, ni por un candidato,
sino en contra el modelo que Chávez llevó adelante”.
Lo mismo sucede con
el oficialismo, donde la gente “no está votando por Maduro, sino que está
votando por el candidato de Chávez”, sentenció.
Publicado en:
No hay comentarios:
Publicar un comentario