REFLEXIONES ACERCA DEL TRIUNFO EN CATAMARCA, por Adrián Corbella (para "Mirando hacia adentro")

Cuando se realizan varias elecciones en distintas fechas, lo más difícil es analizar hasta que punto influye lo local, cuál es el peso de lo regional, y en qué medida incide lo nacional.
Por eso, para analizar esta cuestión, y sus implicancias, podríamos empezar por los hechos : Catamarca llevaba veinte años de gobierno del Frente Cívico y Social, coalición formada, luego de la caída del saadismo, sobre la base de la UCR catamarqueña.
El actual gobernador, Eduardo Brizuela del Moral, un radical cobista, iba por una nueva reelección.
La fórmula que finalmente resultó vencedora estaba encabezada por Lucía Corpacci, que había sido aliada de Brizuela del Moral desde 2007 hasta la ruptura de éste con el oficialismo nacional, luego del voto “No Positivo” de Julio Cobos.
Corpacci había reunido en el FpV local , para la elección del pasado domingo, a casi todos los sectores del justicialismo provincial, incluyendo a los resabios del saadismo, pero dejando afuera al sector de Liliana y Luis Barrionuevo, dirigentes vinculados al duhaldismo y al Peronismo Federal.
Dos o tres semanas antes de la elección, las encuestas daban por ganador a Brizuela del Moral, pero las cifras comenzaron a cambiar cuando Cristina Fernández de Kirchner dio un apoyo claro y explícito a Corpacci.
El Frente Cívico y Social hizo una buena elección, pero perdió.
El barrionuevismo duhaldista obtuvo menos del 2% de los votos, condenando a la extinción al Peronismo Federal de la provincia.
Estas son cifras y hechos concretos ; pasemos a las interpretaciones.
Los catamarqueños representan un 1% del padrón electoral nacional. Si uno tiene en cuenta sólo ese aspecto y piensa que la elección sólo refleja la realidad local, podría considerarse, a nivel país, al resultado como intrascendente.
Pero hay otras posibles lecturas.
Catamarca no es tan distinta a otras provincias del Noroeste, e incluso del Interior en general. Muchas de estas sociedades provinciales son profundamente conservadoras. En ellas los partidos de izquierda tienen una participación casi nula. Los votos se dividen entre el P.J. y la UCR ; y las versiones locales del peronismo y el radicalismo son mucho más conservadoras que el perfil que plantean estas mismas fuerzas a nivel nacional. Los partidos provinciales, cuando existen, son más tradicionales aún.
Por eso, la victoria del FpV en Catamarca y, sobre todo, el hecho de que haya sido la Presidenta la que “volcó” el resultado a favor de Corpacci con su apoyo, tiene varias posibles interpretaciones.
El periodista Felipe Yapur planteaba hace un par de días en una nota de “Tiempo Argentino” que “los conservadores también pueden ser kirchneristas”. Es decir, si el voto en Catamarca no obedece a razones locales sino regionales (o tal vez nacionales), el significado es muy claro : el kirchnerismo ha horadado el “techo” del voto peronista-progresista , del voto “K” más “ideológico”, y se está extendiendo a sectores sociales que, aunque quizás puedan discrepar con algunas políticas puntuales, reconocen al gobierno una serie de logros incuestionables.
Si ésta es la interpretación correcta, explicaría porqué hay algunas encuestas a nivel nacional en las que Cristina Fernández tiene un intención de voto superior al 45% (lo que le garantizaría una victoria sin ballotage sin importar la diferencia con el segundo) y una imagen positiva que sobrepasa el 60%.

Adrián Corbella, 16 de marzo de 2011.

Esta nota fue publicada el 17 de marzo en los siguientes medios :

Revista digital "Redacción Popular" :
http://www.redaccionpopular.com/articulo/reflexiones-acerca-del-triunfo-en-catamarca


Diario digital "elDiario24.com"

http://www.eldiario24.com/nota/217154/reflexiones-acerca-del-triunfo-en-catamarca.html