En el ambiente periodístico se preguntan cuál será la línea de Clarín tras el arrollador triunfo de Cristina, que dejó varios derrotados; entre ellos, sus principales columnistas. ¿Cómo conservar lectores que votan por Cristina?
El arrollador triunfo de Cristina Fernández de Kirchner en las primarias del domingo y la superioridad electoral sobre el resto de los contiendientes, no sólo a hundido en la desorientación a éstos últimos (Duhalde, Alfonsín, Binner, etc.), sino que amenazó con sumir en la depresión a más de un editor periodistico de los multimedios.Según el sitio especializado Diario sobre Diarios, donde el impacto se hizo sentir más agudamente fue en Clarín. A tal punto que uno de sus principales editores –en plena edición del diario del lunes-, entre incrédulo y desesperado, se negaba a dar crédito a los cómputos oficiales y pedía una y otra vez "chequear" si el resultado era el que difundía la junta electoral.
"En la noche del domingo, la redacción parecía un velorio", comentó un redactor del matutino, ya que, según afirman en off desde la redacción de Clarín, se esperaba un 40-42 por ciento para el kirchnerismo y un 20-22 por ciento para su inmediato perseguidor. "Pero el 50 a 12 fue un mazazo”, sostuvo la misma fuente.
Ahora, con los números confirmados y la contundencia del resultado a la vista, la pregunta que cunde en el ambiente periodístico es: “¿Qué hará de ahora en más Clarín?”, en referencia a su línea editorial estratégica: confrontar siempre y bajo cualquier pretexto con el kirchnerismo y la Casa Rosada.
El resultado del domingo se suma a la continua caída de las ventas que refleja la paulatina pérdida de credibilidad del diario, especialmente desde que se impuso la estretegia frente a las elecciones: "está todo mal..."
Por eso, entre los editores parece primar ahora la "línea dialoguista", cuya principal intención es "suavizar" o "distender" el conflicto permanente con el Gobierno nacional, básicamente en la edición de tapas negativas a repetición. "Desde ya que nadie propone hacer oficialismo, pero a los periodistas les alcanzaría con que dejen de forzar los títulos principales”, comentó un preocupado editor a Diario sobre Diarios.Según fuentes de la redacción, cierta disconformidad con la edición del matutino ya está siendo expresada “en voz alta”. Por ejemplo, se escuchó en Tacuarí: “No podemos seguir diciendo que este gobierno es lo peor de lo peor mientras nuestros lectores lo votan”.
No obstante, también existe una “línea dura” que considera que ya es tarde para un viraje de la línea editorial asumida desde 2009. “Ahora que estamos en el baile, habrá que bailar”, afirman. Por lo pronto, algunos periodistas recordaron ayer con sorna el título principal del diario al día siguiente del balotaje porteño, en el que afirmó que Macri “hundió al kirchnerismo”.
Sin embargo, al menos en la edición de hoy parece haber prevalecido la primera de las líneas y, de un modo general, el sentido común: "El voto de Cristina cruzó todas las clases sociales", tituló en tapa.
Un título positivo después de tanto tiempo...
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http://www.diarioregistrado.com/Politica-nota-52091-El-gran-dilema-como-sigue-Clarin.html#D
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