Hace más tres meses ese país se encuentra
convulsionado por la desaparición de los 43 estudiantes de la localidad
de Ayotzinapa. Un repaso de INFOnews por la situación actual. La relación entre la política y el narcotráfico.
El 26 de septiembre pasado, 88 estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos del pueblo Ayotzinapa
sufrieron un ataque donde resultaron asesinados 6 jóvenes, 25 fueron
heridos y 57 quedaron desaparecidos (14 de ellos fueron hallados el 30
del mismo mes). Con todas las incógnitas del caso sin revelarse se supo que la policía municipal fue la que interceptó y atacó
(junto a sicarios) el ómnibus que los transportaba hasta Iguala donde
la mujer del alcalde José Luis Abarca Velázquez iba a pronunciar su
candidatura para suceder a su marido.Los desaparecidos fueron entregados al cártel "Guerreros Unidos" por pedido expreso del ex alcalde. De acuerdo a uno de los arrepentidos, los asesinos habrían matado y quemado en un basural los cuerpos de los 43 estudiantes.
Hay miles de interrogantes. En México se desató una ola de reclamos por la aparición con vida de los 43. El gobierno del PRI, comandado por Enrique Peña Nieto quedó en la mira de todas las organizaciones y, en especial, de los Estados Unidos.
Las claves de este caso podrían ser ¿cuál es el vínculo que tiene la política con el narcotráfico? y ¿por qué México tiene altos índices de violencia? La relación que existe entre María de los Ángeles Pineda Villa (esposa del alcalde destituido y encarcelado), y el cártel Beltrán Leyva es grande y grave. Sus tres hermanos son parte integrante.
“Lo hace responsable (al alcalde José Luis Abarca Velázquez) por dar una orden de investigación. Además por complicidad, negligencia. Pero no es el único. Enrique Peña Nieto no puede permitir que esto suceda en México. También lo es el Procurador General de la República por dar información falsa”, dice Fernando Buen Abad Domínguez a INFOnews sobre la complicidad de parte el aparato político.
“Lo que sucede en primer lugar es que fueron liberados los territorios, autopistas, tránsito marítimo y aeroportuario. Esto nace de la connivencia entre los cárteles y el aparato de gobierno”
En el caso de los normalistas que fueron desaparecidos, hubo complicidad entre el palacio municipal, el presidente municipal, el alcalde José Luis Abarca Velázquez (PRD) y su mujer, la participación de las policías municipales sumada a la indiferencia del Ejército.
“Desde la década del 60 que existe una guerra contra el gobierno. Porque es un estorbo, al igual que los estudiantes críticos, activistas, son un dolor de cabeza para el gobernador porque realizan denuncias sobre el crimen organizado”, comenta el Magister en filosofía política a INFOnews.
Hubo varios detenidos. El alcalde y su mujer vinculados a Guerreros Unidos, el supuesto jefe del cártel, Sidronio Casarrubias Salgado y muchos policías. Más de 50 personas se encuentran bajo arresto. Al gobernador de Guerrero le fue otorgada una licencia por el Congreso para esclarecer los hechos. Una de las hipótesis es que las autoridades no querían un nuevo ERPI (Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente) en México. Días más tarde aclararon que ninguno de los jóvenes estaba involucrado al crimen organizado.
“Lo que sucede en primer lugar es que fueron liberados los territorios, autopistas, tránsito marítimo y aeroportuario. Esto nace de la connivencia entre los cárteles y el aparato de gobierno”, agrega el doctor en filosofía a INFOnews.
Lo que surge de todo esto son el aumento de las cifras de los homicidios y desaparecidos relacionados al crimen organizado que se instalaron en México desde hace más de siete años. A partir de 2007 los números crecieron de manera alarmante. La lucha contra el narcotráfico que llevó adelante Felipe Calderón (2006-2012) dejó un tendal de víctimas notorio: al menos 85 mil personas fueron asesinadas, de acuerdo a la información que publica el sitio zocalo.com.mx de México.
A partir de 2012, ya con Enrique Peña Nieto a cargo de la administración del Estado, 8 mil civiles fueron reportados como perdidos o desaparecidos.
México en general y Guerrero en particular, aumentaron sus índices de violencia siendo el crimen organizado y el narcotráfico los actores principales. Entre 2008 y 2010 fue el tercer país en registrar el promedio anual más alto con 33,9 % al pasar de 12,7 homicidios por cada cien mil habitantes en 2008 a 22,7 en 2010 según datos de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD).
Entre 2008 y 2011, 29 de los 32 estados aumentaron sus registros sobre homicidios. Las medidas adoptadas por los gobiernos para combatir a los cárteles, parecen no ser efectivas. Guerrero está por encima del 50 por ciento de homicidios atribuidos a la delincuencia.
La impunidad es otra variable que influye en estas cifras. Se han reiterado los casos de feminicidios, las desapariciones forzadas, la represión estatal, entre otras. Las matanzas de los grupos criminales que han sembrado de cadáveres el país en los últimos ocho años. De todos estos casos, son muy pocos lo que sido procesados sin intervención del Estado.
“El caso de Guerrero no es reciente. Se dio a conocer por la desaparición de los normalistas. Siempre fue un estado silenciado. No es el único, Tamaulipas y Tijuana son centros de terror. Es decir, todos aquellos que son fronterizos con los Estados Unidos”, agrega Buen Abad Domínguez.
Guerrero es el máximo exponente de la violencia actual y cuadruplica la media nacional. En los últimos años las medidas para frenar al crimen organizado hizo que detuvieran a 86 de los 122 capos publicó la web www.deia.com
La impunidad está pudriendo por dentro a México a raíz de la cual se han reiterado los casos de feminicidios, las masacres de inmigrantes centroamericanos, las desapariciones forzadas
Pero para el teórico estos son titulares para la tribuna y así eludir tomar decisiones fuertes para hacerse cargo de la situación. “Otro de los grandes problemas que tiene Guerrero es el tema de las cifras. Debido a la inoperancia del aparato de la justicia hacen que se no sepa. En principio son 140.000 las víctimas ligadas a los homicidios desde que comenzó la guerra contra el narcotráfico. Hay un obstáculo jurídico-político. En esas cifras no se contemplan a quienes fueron desplazados por amenazas del crimen organizado”, sostiene el vicedirector de la UNAM.
Sin embargo ante el “desarme de los grupos”, el descuido de los municipios hizo que nacieran pequeñas agrupaciones como "Guerreros Unidos" que opera en ese espacio. Según Lorenzo Meyer, historiador y periodista mexicano, aclara que “no hay una disminución de las acciones de crimen organizado, no hay una disminución del envío de droga de México a Estados Unidos, lo que hay son estructuras más pequeñas, como `Guerreros Unidos`”.
“En Guerrero, si antes los grupos criminales sugerían quién debía ser el jefe de la policía, ahora ordenan su nombramiento, pues el control se extendió a los gobernantes”, asegura el diario mexicano El Universal.
Según la Procuraduría General de la República (PGR) en todo el país operan nueve grandes cárteles: del Golfo, del Pacífico o Sinaloa, Arellano Félix, La Familia Michoacana, Carrillo Fuentes, Beltrán Leyva, Los Zetas, Los Caballeros Templarios y el cártel Nueva Generación de Jalisco. Pero en todo el territorio de Guerrero lo hacen cuatro, de acuerdo a lo que publicó el diario digital deia.com. Guerrero es el reflejo de la desigualdad social, pobreza, luchas guerrilleras, corrupción e impunidad. Además uno de los mayores productores de marihuana y amapolas.
La de Ayotzinapa no es la primera cacería que registre Guerrero. En 1995 se produjo la masacre de Aguas Blancas, donde el Estado tuvo alta injerencia ya que policías (a las órdenes del PRI) asesinaron a 17 personas Organización Campesina de la Sierra del Sur.
Edgardo Buscaglia, especialista internacional, advierte de que “el 70% de las campañas electorales mexicanas están financiadas por grupos criminales”. Estos números sorprenden al igual que las fosas clandestinas que fueron convirtiéndose en noticia cotidiana.
"En principio son 140.000 las víctimas ligadas a los homicidios desde que comenzó la guerra contra el narcotráfico. Hay problema jurídico-político"
Las marchas y manifestaciones pidiendo la aparición de los normalistas se hicieron más frecuentes. Cruces con efectivos policiales y los familiares, el fuego desatado en la intendencia, más fosas clandestinas con restos óseos.
Se celebró un nuevo aniversario de la revolución mexicana donde se produjeron algunos incidentes, ya que muchos manifestantes pidieron la aparición con vida de los jóvenes. En el medio de toda esta situación quedó el recuerdo de aquellos estudiantes que fueron masacrados el 2 de octubre de 1968, en vísperas de los Juegos Olímpicos de ese año en la plaza de las Tres Culturas de la ciudad de Tlatelolco.
Ante toda esta situación el sábado 6 de diciembre, el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) encontró restos de uno de los estudiantes en un basurero del municipio de Cocula (al surl de. Las muestras pertenecen Alexander Mora Venencio, según las autoridades del colegio Normal de Ayotzinapa.
De acuerdo de las fuentes oficiales, los restos del estudiante fueron identificados en los análisis de ADN que se realizan en un laboratorio de Austria. Desde el 26 de septiembre (día de la desaparición) es la primera pista de los 43 jóvenes.
El presidente presentó un plan de seguridad y justicia con el objetivo de “ordenar” la conmoción sociopolítica, no realizó ninguna autocrítica de lo sucedido con los estudiantes y el conflicto social se agrava.
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