Es difícil encontrar en Argentina alguien que se defina ideológicamente como “de derecha”. Lo mismo sucede con el concepto de “liberal”, categoría que al menos en Argentina va de la mano con la anterior… nadie reconoce tener esa ideología.
Si ha habido un ícono de la derecha liberal en Argentina, ese ha sido el ya fallecido Capitán Ingeniero Álvaro Alsogaray (1913-2005), político, militar y economista que fue varias veces legislador y ministro de economía.
Incluso una figura icónica del liberalismo como Alsogaray, fundó en 1982 un partido llamado UCéDé (Unión de Centro Democrático)… o sea que él no se reconocía como un hombre de derecha, sino como un centrista. Y no era liberal, sino “demócrata”. Lo mismo pasa con virtualmente todas las personas que profesan una ideología de derecha liberal en la Argentina. Niegan ser de derecha. E incluso niegan ser liberales. Ayer pasaba con la UCéDé… hoy pasa con el PRO. La gente que pertenece al PRO o lo vota niega ambas categorías. En una orgía de creatividad el asesor ecuatoriano del partido, Jaime Durán Barba, llegó a decir hace unos meses que Mauricio Macri es un hombre “de izquierda”… … …El “Pro es el único partido de izquierda que hay en la Argentina” le dijo el ecuatoriano a “La Nación”.
¿Qué declaran ser estos liberales no confesos, más allá de la “humorada” de Durán Barba?... Se sienten portadores del sentido común. Apoyan medidas inevitables… “no queda otra”… “es lo único que se puede hacer”… “hay que darle tiempo”… “estamos mal pero vamos bien”…”es lo que se hace en otras partes del mundo”… Para ellos la ideología es lo que tienen los otros: los socialistas, los fascistas, los anarquistas, los keynesianos. Ellos no tienen ideología. Ellos son portadores de un conocimiento objetivo. Ellos son INDEPENDIENTES.
Ese concepto encierra una trampa terrible. Porque lo únicos “independientes” son ellos. Los demás están “contaminados” por una ideología. Los demás son militantes.
Entonces cuando un liberal no confeso dice que quiere una justicia independiente, funcionarios independientes o una prensa independiente, lo que está pidiendo es poner gente que, como ellos, no traiga una “carga ideológica”. Gente que se guíe por el “sentido común”. Que haga las cosas que se deben hacer. Que piense como él. Los liberales no confesos quieren que todos los funcionarios, periodistas y jueces sean “independientes” como ellos, para garantizar el “pluralismo”.
El pluralismo se garantiza según ellos cuando no se ponen en esos cargos a militantes. Cuando se pone gente independiente. Cuando TODOS son liberales –no confesos- … … …
Adrián Corbella
24 de abril de 2016
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