|
Derrotero de un intendente
Vivimos un tiempo de hacedores que siguen el camino, mientras otros lo comentan o lo denostan.
"Ella nada en el río mientras él lo mira desde la orilla." Julio Cortázar, Rayuela.
La política la hacés, o te la hacen." Con esta frase concluía la
columna que escribí el pasado 24 de junio. El cambalache del rejunte de
radicales, socialistas, cineastas, pitonisas, trotskistas en vergonzoso
descenso, izquierdistas a la violeta, con privatistas y agentes de los
organismos multilaterales de crédito, daban sustento al título de la
nota: "En la vidriera irrespetuosa". La exposición de los candidatos, y
sus historias y trayectorias controvertidas entre sí, eran y son
suficientes, sin necesidad de adjetivaciones y sólo a la vuelta de
cualquier archivo o ejercicio de la memoria.
La conformación de este combo que baila por un sueño imposible, se
parece a esos armados de ocasión que se inventan para conseguir un poco
de público en algunas obras veraniegas que se pasean por los teatros de
Carlos Paz y Mar del Plata. Sin carnadura dramática ni profundidad
temática, apuestan a un puñado de clientes en base a declaraciones
altisonantes, la profundidad de los escotes, y de escándalos y denuncias
en los sets de televisión y las revistas del corazón, o en los
programas y noticieros "independientes" de los medios hegemónicos. El
vedetismo une dos mundos aparentemente diversos. Pero esta es una
historia de navegantes de tortuoso rumbo. De argonautas buscando
infructuosamente el vellocino de oro del respaldo popular.
Otra escena se ha develado con tanta sorpresa, como la que nos
produciría que nos avisaran hoy que los Reyes Magos son los padres.
Preparado y amasado con fruición y paciencia por el establishment, el
ex (?) hombre del ex senador Duhalde se lanzó para combatir al proyecto
nacional y popular que conduce la presidenta. Ya el 18 de marzo de
2009, quienes estábamos en el Teatro Argentino de La Plata cuando
Cristina presentó el anteproyecto de la Ley de Servicios de Comunicación
Audiovisual, percibimos claramente el malestar e incomodidad de uno de
los oradores.
El entonces jefe de Gabinete Sergio Massa –de él se trata– aparecía
desolado y fuera de lugar. Su ámbito –como su antecesor Alberto
Fernández– estaba y está junto al Grupo Clarín y todo lo que representa.
Cabe agregar que entre los que aplaudían alborozadamente el
lanzamiento, estaban Hugo Moyano, Omar Plaini y Julio Piumato, socios
políticos del rabioso enemigo de la Ley 26.522, diputado y empresario de
medios, Francisco de Narváez. La insoportable gravedad del ser traidor.
Pero volvamos a Sergio "Calculín" Massa. En la excelente nota del
pasado 27 de junio de la colega Soledad Guarnaccia habla de la política
"profile", la de la búsqueda de perfiles que a la manera de un producto
comercial puedan atraer a eventuales votantes.
Tengo para mí que la construcción de la figura y el derrotero del
intendente de Tigre es como la de un lienzo en blanco, como la de una
página sin escribir, como la de un espejo a la espera de una imagen para
reflejar. La de alguien aparentemente blando y blanco, sobre el cual se
puede dibujar y proyectar lo que uno desea, y crearlo a imagen y
semejanza del medio pelo argentino.
Oponerse a la democratización del Poder Judicial o a la defensa de
las reservas de la Argentina –lo que ellos llaman el "cepo cambiario"–,
no pronunciarse sobre los crímenes de la dictadura cívico-militar, que
tanto hartan a Jorge Lanata, hablar de consensos –que esconden
claudicaciones– y exhibir su sonrisa escondiendo los colmillos, lo han
hecho conocido y tranquilizador para algunos y en un preferido de las
corporaciones que lo promueven. Su equipo de candidatos revela sus
intenciones e inconsistencias y el valor que le otorgan al conocimiento
público por sobre los de la construcción política y de explicitación de
proyectos.
Sumando jóvenes y preparados militantes, y probados hombres y mujeres
del campo nacional y popular, la presidenta conduce y acompaña listas
donde la representación está dada por la fidelidad y la entrega por todo
lo conseguido en esta década ganada y la firme convicción de que es
necesario seguir avanzando y ampliando derechos. La decisión de que
alguien como el joven intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde,
gestor, militante que comparte cara a cara y pone el cuerpo con su
pueblo y trabaja por todos ellos, como primer candidato a diputado por
la provincia de Buenos Aires, confirma que el Frente para la Victoria
juega su representatividad apelando a lo más noble de la política y
alejado de la farandulización y de la lógica de ricos y famosos tan cara
al macrismo y el denarvaísmo (y ahora al massismo).
Otro tanto en Capital con un joven como Juan Cabandié, que desde
aquel día de la recuperación de la ex ESMA no ha parado de crecer,
prepararse y demostrar que Néstor Kirchner tenía razón al haberlo
promovido.
Vivimos un tiempo de hacedores que siguen el camino, mientras otros
lo comentan o lo denostan. De protagonistas por un lado y de un coro de
grillos que cantan a la luna y de carroñeros que esperan los restos de
lo que otros supieron conseguir, por el otro.
A meses de iniciarse el año Julio Cortázar, vale parafrasear a Oliveira
que en Rayuela definía a La Maga: mientras Cristina y el pueblo que la
sigue cruzan el río, ellos miran desde la orilla.
Sigamos unidos y organizados, que lo mejor está por venir.
Publicado en:
http://www.infonews.com/2013/06/29/politica-83637-ella-nada-en-el-rio.php
No hay comentarios:
Publicar un comentario