Telegramas con aroma a persecución
Los despedidos habían sido nombrados por concurso. Hernán Lombardi, titular del Sistema Federal de Medios, admite que sus reemplazantes fueron designados a dedo, por decisión política.
Por Emanuel Respighi
"La radio de todos". El slogan de Radio Nacional bajo la gestión de Cambiemos empieza a vaciarse de contenido. Al menos esa es la sensación que queda flotando en el aire luego de que la actual administración despidiera a 21 profesionales, que "casualmente" se habían desempeñado como directores de las filiales provinciales que la emisora tiene diseminadas por todo el país durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. En la resolución firmada por Miguel Pereira, presidente de Radio y Televisión Argentina Sociedad del Estado (RTA SE), se señala que los despidos obedecen a "necesidades operativas", sin aclarar de cuáles se trata. Lo llamativo es que de quienes la actual gestión "prescindió de sus servicios" --tal como rezan los telegramas enviados-- habían llegado al cargo de directores de las emisoras por concurso público, tal como lo estipula la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (LSCA). En contraposición, ninguno de los directores actuales de las emisoras públicas accedió a su puesto por esa vía: se trataron de designaciones políticas.
Un año después de haber sido desplazados de sus cargos de directores hacia funciones menores, los ex directores de las emisoras de Radio Nacional de distintas localidades que aún se desempeñaban en otras tareas en esos medios recibieron el telegrama de despido, fechado el 7 de abril. Algunos pudieron ingresar a sus lugares de trabajo, en donde personal administrativo les dio la noticia junto a una copia de la misiva. A otros directamente les negaron el ingreso. Pablo Ferrero (La Pampa), Elena Corvalán (Salta), Jorge Ramírez (Rosario), Ernesto Espeche (Mendoza), María Eugenia Cisneros (Córdoba), Ariel Loreto (Ushuaia), Omar Turconi (Bahía Blanca), Ramiro Rearte (Tucumán), Federico Sánchez (Zapala), Lorenzo Hernández (Río Turbio), Itumelia Torres (Iguazú), Carlos Mendez Bogado (Las Lomitas), Verónica Sesin (Santiago del Estero), Sebastián Abraham (San Salvador de Jujuy), Martin Illanez (La Rioja), Wences Rubio (San Luis), Carlos Echeverría (Bariloche), Matías Ciampini (Neuquén), Pablo Zamorano (Ingeniero Jacobacci), Ghittoni Horacio (Paso de los Libres) y Claudia Rus (Mendoza LV8) fueron los ex directores a los que la gestión actual entendió que era "necesaria la rescisión de los contratos de Trabajo".
"Queda en evidencia que nuestros despidos tienen un causal ideológico", señala Espeche, que desde 2010 trabaja en Nacional Mendoza, donde había asumido como director en enero de 2013, tras haber aplicado a un concurso. "La resolución con nombre y apellido parece propia de una lista negra", cuenta el periodista a Página/12. "Todos los que allí figuramos tenemos un perfil, que no tiene que ver con ser o no kirchnerista, sino con haber ganado concursos durante el gobierno anterior, y compartir una mirada sobre el modelo de periodismo que debe tener un medio público. Durante este año hemos recibido presiones editoriales a la hora de proponer una nota o darle un tratamiento determinado. Los despidos son el corolario de una política de vaciamiento de contenidos de la radio pública: se redujo la producción propia, se perforó la calidad periodística, se tomaron medidas que acotaron la programación a grillas mínimas, funcionando como meras repetidoras de la AM 870, cuando antes tenían su propia programación. Decisiones que forman parte de la construcción de un discurso cerrado, para nada crítico, contrario a los ideales de pluralismo que la actual gestión pregona."
En diálogo con Página/12, el titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos, Hernán Lombardi, del cual depende Radio Nacional, justificó la "rescisión de los contratos" bajo el argumento de que se trataba de "designaciones políticas" del gobierno anterior. "Nuestra gestión no quiere que haya capas geológicas en el Estado que van quedando ante cada cambio de gobierno. Entendemos que se trataba de puestos políticos. De hecho, muchos de los ex directores habían renunciado al cambiar el gobierno. No fue el caso de estos", explicó.
--Los trabajadores despedidos señalan que todos habían llegado al cargo por concursos públicos.
--No es así. Ni todos llegaron por concurso público ni los concursos fueron transparentes. Además, los concursos tampoco eran vinculantes. Creemos que las capas geológicas de puestos políticos le hacen muy mal al Estado, porque quitan recursos para escuelas, hospitales...
--Sin embargo, los actuales directores de las emisoras de Radio Nacional no llegaron por concurso público. Fueron designaciones políticas.
--Es verdad. Por eso todos los directores de las emisoras públicas designados por esta gestión se comprometieron a renunciar a su cargo cuando finalice la gestión de Mauricio (Macri) como presidente. Nosotros asumimos que un director de una radio pública es un cargo político.
La decisión de dar de baja a 21 ex directores de las emisoras públicas fue criticada desde algunos sectores. La asociación Comunicadores de la Argentina (COMUNA) definió la medida como parte de una "persecución ideológica", reclamando la "reincorporación inmediata" de los trabajadores, "ya que en ningún caso se trata de despidos con causa fundada y justificados en las leyes vigentes".
Publicado en:
https://www.pagina12.com.ar/31429-telegramas-con-aroma-a-persecucion
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