Néstor Kirchner llegó al poder en 2003 con un 22 % de los votos. Menem, con un 2 % más, había salido primero, pero no se animó a asomarse al ballotage porque todas las encuestas le daban muy mal. Tercero, a pocos puntos de Kirchner, estaba Ricardo López Murphy.
Muy pocos de los votantes de Kirchner tenían claro qué estaban votando. Posiblemente la única excepción fueran los santacruceños en particular, y los patagónicos en general. Respecto al resto de los argentinos, algunos votaron a Kirchner porque lo apoyaba Duhalde. Otros, como me pasó a mí, porque la opción de un ballotage entre Menem y López Murphy parecía una pesadilla inconmensurable.
El pingüino vino desde atrás, corriendo a un ritmo modesto, aunque con un discurso interesante. Pero : ¿Quién le creía al discurso de un político en la Argentina del 2003?.
Ya elegido presidente, Kirchner sorprendió desde el primer día, desde el primer discurso, desde que se escapó de la custodia y se metió entre el público, asumiendo con un corte en la frente provocado por la cámara de un fotógrafo ; desde que hizo malabares con el bastón de mando; desde que apareció con su saco cruzado abierto y sus mocasines ; desde que comenzó con sus políticas audaces y progresistas.
Recuerdo como si fuera hoy cuando terminó ese primer discurso. Yo me asomé a la puerta, ví en frente a mi vecino Gerardo, me crucé y nos pusimos a hablar. Él había votado al socialismo. Yo a Kirchner. Los dos estábamos sorprendidos. Creo que fue él el que dijo : “Con que haga la mitad de lo que dijo, estoy hecho…” . Hizo eso y mucho más.
Al principio decían que estaba manejado por Duhalde. Luego que lo manejaba su esposa. Pero a mí me iba pareciendo cada vez más uno de esos locos que hacen la Historia, esos irreverentes que impulsan las grandes transformaciones.Y lo fue. Kirchner fue el hombre sorpresa, el que bajó el cuadrito de Videla, el que renegoció con una fenomenal quita la deuda y puso de patitas en la calle al FMI, el que mandó al demonio a Bush y al ALCA, el que inició la fuerte integración latinoamericana que hoy vivimos, el que se negaba fanáticamente a reprimir piquetes o protestas, el que defendió los derechos humanos y se acercó a Madres y Abuelas, el que comenzó a desandar el camino del neoliberalismo que había llevado al país al abismo.La popularidad de Néstor (el Kirchner ya había quedado atrás ) era enorme en 2007. La reelección era segura. Y el hombre sorpresa, el pingüino patagónico, nos volvió a sorprender : ¡ Se trajo una pingüina!...¿Quién era Cristina Fernández?... Por entonces era Senadora y primera dama, y aparecía como candidata por el oficialismo. El nombre nos sonaba, pues tenía una larga trayectoria legislativa, pero … ¿Quién era?...
Y ahí la empezamos a escuchar, algunos discursos, algunos actos… ¡Mamita! … ¿De dónde la sacó?... Recuerdo que la primera vez que la escuché hablar no pude evitar pensar en Eva Perón. Y además de cierto estilo y personalidad, demostraba una capacidad pasmosa para decir discursos muy coherentes sobre casi cualquier cosa, sin ningún papel, sin nada más que su cerebro. Empezamos a buscar referencias y lo que aparecía era muy claro : es como Néstor pero más radical, más dura.
Volvimos a ganar, esta vez con el 47% de los votos.
Y allí empezó el infierno. A seis meses de asumida la nueva presidenta estábamos en el conflicto del campo, y veíamos la traición de muchos legisladores que acabábamos de votar.
Todo empezó en el exterior. En el 2008 se produjo un alza especulativa del precio de los alimentos. El precio de la soja se descontroló. El gobierno hizo lo lógico : retenciones móviles a las exportaciones, para evitar que los precios externos incidieran sobre el mercado interno, y para equiparar los márgenes de ganancias de industria y campo. Todo muy lógico, los medios de prensa serios como Página 12 o Le Monde Diplomatique lo explicaron (¿Quién los lee?), pero los productores comenzaron a hacer cortes de rutas, y los grandes medios concentrados los apoyaron. Cuatro meses de cortes de rutas, Buenos Aires sitiada. Los medios concentrados hablando de “soberbia”, de “capricho”, de “voracidad fiscal”; cubriendo las asambleas de piqueteros ruralistas en directo, como si fuera un reality. Cada vez más gente en contra del gobierno. Los medios tratan de instalar la imagen de una presidenta controlada por su marido (¿No era al revés en 2003-07?)…
Los canales de noticias transmitían casi en cadena ; la cara de Alfredo de Angeli y de otros dirigentes ruralistas era tan conocida como la de Maradona. Todo el día, todos los días, radios, canales de TV, diarios impresos y digitales, canales de noticias, golpeaban incesantemente al gobierno por su política “caprichosa” y “voraz” y defendían a esos pobres chacareros que concurrían a los piquetes montados en impresionantes camionetas 4 x 4. Era algo insoportable, más aún sabiendo que el tema se explicaba muy mal, ya que la gente que defendía al campo sin tener intereses directos en el tema no era conciente de que iba claramente contra sus propios bolsillos. Creo haber contado en otra nota que debí transformarme durante 4 meses en oyente de la AM 530 La Radio de las Madres, única que daba una información “profesional” y “seria”.Finalmente, Cristina envía las retenciones al Congreso . Victoria en diputados ; empate en el Senado. Desempata el vicepresidente Cobos (al que no le conocíamos ni la voz), y traiciona al oficialismo.
El voto “No Positivo” fue un trago muy amargo. No sólo por la artera traición del vicepresidente (los que lo votamos no estábamos muy contentos que digamos) sino por la preocupación acerca de las consecuencias económicas para el país si la soja continuaba subiendo (Afortunadamente su precio internacional comenzó a bajar).
¡Qué meses duros!...
La popularidad del gobierno había caído a cerca del 20%, había claros movimientos destituyentes. La prensa concentrada trataba de proyectar a una figura anodina y traicionera como Julio Cleto Cobos a dimensiones épicas.
¡ Qué difícil era ser kirchnerista !
Aguantar la embestida mediática y su consecuencia : miles de “Doñas Rosas” cuyos líderes espirituales eran Susana Giménez, Mirtha Legrand o Marcelo Tinelli.
¿Cómo se opone, en un debate, “Le Monde Diplomatique” contra Mirtha Legrand?...
¿Cómo explicarle porqué se produce la inflación a alguien que no sabe nada de economía, y encima lee o escucha medios mentirosos?...
¿Cómo explicarle al que primero se oponía a las retenciones y luego se queja por la inflación que es un incoherente, que pide cosas contradictorias?
Sin embargo, algo estaba cambiando.
A nivel mediático, aparecieron poco a poco los blogs nac & pop, 678, nuevos diarios, una reformulación de la TV Pública y de Radio Nacional…
Al unicato mediático se le empezó a responder con nuevas voces, nuevos medios…
Para la oposición era, como diría Rosendo Fraga, Fin de Ciklo. Las voces destituyentes arreciaron.
Claro que había otras lecturas de la elección, no tan catastróficas, que hacíamos los vapuleados simpatizantes del kirchnerismo : en medio de una crisis mundial, tras el desgastante conflicto con el “campo” y la traición de Cobos, con una prensa fuertemente hostil, el kirchnerismo había mantenido un núcleo “duro”, un piso blindado, del 30% de los votos… No era poco para un contexto tan inclemente.
De todas maneras, los pingüinos asimilaron el golpe, y volvieron a sorprender : Fútbol para Todos, Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, Asignación Universal por Hijo, Ley de Matrimonio Igualitario, ofensiva total contra el grupo Clarín con la TV Digital, Papel Prensa, …
Los festejos del Bicentenario también hicieron su aporte.
Las acciones del gobierno comenzaron a subir, proceso que aún no se ha detenido.
Un día antes del fallecimiento de Néstor Kirchner, el oficialismo tenía en sus filas a las tres personas que mejor medían como candidatos a presidente : Cristina Fernández, Néstor Kirchner y Daniel Scioli –en ese orden, 37, 35 y 25 % respectivamente-.
La victoria en primera vuelta, superando el 40% y sacando diez puntos de ventaja al segundo, parecía muy posible. Las chances de ganar el Ballotage, si se llegaba a él, no eran nada malas.
El 27 de octubre, el hombre de las sorpresas nos ofrendó su jugada final. La inesperada muerte de Néstor Kirchner complicó al oficialismo, que pierde a un estratega político, pero descolocó completamente a la oposición.
En primer lugar, porque sacó al kirchnerismo a la calle, mostrando su peso numérico, la polenta de sus militantes, su incidencia demoledora en el ámbito del arte, la cultura y los intelectuales, y la importancia de su componente juvenil. Desde la tumba Néstor lanzó su último misil contra el Grupo Clarín… ¿Será el último?... Porque dejó una heroica pingüina, que viene gobernando desde el 2007 frente a la oposición más intolerante de la historia. Y es una pingüina inteligente, hábil, tenaz y amante de las sorpresas.El segundo gran problema es que durante años sostuvieron que el verdadero gobernante era Néstor, y que Cristina era sólo una especie de mascarón de proa…¿ Cómo se hace ahora para cambiar todo el discurso y apuntar los cañones contra la pingüina?... Y hacerlo sin quedar además como unos canallas inhumanos que arremeten contra una viuda dolida por la pérdida de su compañero de 35 años...
Se les acaban también muchos latiguillos, como el de la “monarquía”, la “pareja presidencial”, y otras estupideces por el estilo.
El tercer gran problema que tienen es la realidad ; la de un país que ha sido bien administrado por el kirchnerismo, que es respetado internacionalmente, y la propia evidencia de una oposición inepta, vengativa, intolerante, impresentable, a la que no se le cae una idea. Una oposición que sólo construye hechos “No Positivos”.
A nosotros, simples ciudadanos comunes que votamos por un proyecto de país, que vimos como una fuerza política anticipaba nuestros sueños, realizaba aquellas cosas que queríamos pero que habíamos almacenado en el cajón de las utopías, el golpe fue duro.
Se nos fue un hombre de esos que no merecen morir, de esos que luego son recordados por generaciones y se transforman en leyenda.
En el aspecto político la cosa no es tan grave. Por supuesto que hay inquietudes, dudas, desconfianzas ; pero también hay certezas, esperanzas, proyectos. Porque sabemos quien tiene en sus manos el timón del barco. Y no dudamos ni de su capacidad, ni de su entereza, ni de su fortaleza. Y no la vamos a dejar sola ; eso le quedó claro, a todos, el 27, 28 y 29 de octubre.
A los que estuvimos tan solos en aquellos duros meses de la ofensiva mediática de 2008-2009, a los que soportamos estoicamente porque veíamos la transformación de las utopías en objetos terrenales, esta realidad de los últimos días, pese al dolor, nos hace sentir menos solos. Nos permite ver que no nos equivocamos cuando hicimos el aguante, cuando le pusimos el pecho al tsunami mediático y nos mantuvimos firmes.
Estamos de pie. Y no estamos solos.
Adrián Corbella, 4 de noviembre de 2010.
4 comentarios:
Muy buen articulo.
IMPRESIONANTE ADRI¡¡¡ UN RACONTO ESPECTACULAR MUY BUENA NOTA.
JULIAN
Gracias a los dos.
excelente, recuerdo aquellos días y lo duro que fue, todos pronosticaban el final y sin embargo aquí estamos, firmes junto a ella, la única capaz de lograr lo que falta
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