Día a día crece la intención de voto al Frente de Todos respecto a las PASO. Según Trespuntozero y Clivajes Consultores la brecha sobre Juntos por el Cambio se acerca ya a los 20 puntos. Políticamente, el oficialismo será vencido en las urnas, pero quizá aún no esté derrotado aquel falaz discurso mediante el cual capturó el estado, en beneficio de una elite minoritaria.
por Walter Darío Valdéz Lettieri
@WDVL4
De no mediar una catástrofe política, Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner serán a partir del próximo 10 de Diciembre, presidente y vice de todos los argentinos. El contundente respaldo popular que se descuenta repetirán en Octubre, obedece a múltiples razones políticas y sociales, pero quizá, las de mayor peso específico estén relacionadas al factor económico. Las sucesivas y pavorosas devaluaciones que generó el Gobierno en su fallido mandato, durante el cual el dólar pasó de $ 10 a $ 60 por unidad, derritieron el poder adquisitivo del salario y derrumbaron los niveles de producción y empleo y con ellos la intención de voto de Juntos por el Cambio de cara a las generales de Octubre.
El último trabajo de alcance nacional desarrollado en Septiembre por Clivajes Consultores ( 1267 casos on line con un margen de error de + / -2,80% ) es muy claro sobre dichos factores socioeconómicos “Juntos por el Cambio implementó durante sus tres años y medio de gobierno una toma desenfrenada de deuda, la eliminación de regulaciones a los movimientos de capitales y la obligatoriedad de liquidar divisas para los expotadores. El resultado de estas decisiones políticas, conformaron un presente económico completamente negativo, funcional a la desaprobación mayoritaria que sufrió Juntos por el Cambio en las PASO”
Por su parte el tracking electoral eleborado por Trespuntozero consultora que lidera la Lic Shila Vilker ( 1500 casos de alcance nacional cuyo margen de error es +/- 2,4% ) destaca que un 61,7% de los consultados, califica como mala o muy mala la gestión del gobierno nacional, aplicando tal definición incluso para casi el 10% de quienes votaron al oficialismo en las PASO. El mayor cuestionamiento a la labor gubernamental del Presidente Macri y equipo, se concentra en quienes tienen entre 16 y 50 años de edad.
De acuerdo al trabajo de Trespuntozero, la voluntad de un cambio de gobierno, se expresa mayormente entre varones ( 62,9% ) y muy intensamente en la franja de consultados menores a los 30 años de edad ( 71,5% ) superando en ambos casos, la media que resulta del relevamiento ( 55,8% ) observándose también una caída en el porcentual de opiniones que prefieren la continuidad del gobierno, respecto a la anterior medición de la consultora ( del 38,6% al 36% )
El trabajo del equipo de investigadores sociales que conduce Shila Vilker también aporta luz sobre la probabilidad de voto de Alberto Fernández, Mauricio Macri y Roberto Lavagna y la “fidelidad” de sus electores según lo que sufragaron en las PASO. En tal sentido, se aprecia mayor “lealtad” entre quienes apoyaron la fórmula Fernández/Fernández ( 96,8% ) respecto a los que optaron por el binomio Macri/Pichetto ( 93,4% ) En ambos casos, entre quienes no aseguran repetir su voto de Agosto, la mayor migración electoral sería capitalizada por el modelo que representa Lavagna/Urtubey.
Claramente hay un importante consenso respecto a que Alberto Fernandez, será el próximo presidente de la República, sin embargo tal acuerdo, obedece a razones muy diferentes. Mientras para la gran mayoría de la sociedad el elemento aglutinante descansa en un poderoso emergente que podríamos simplificar llamándolo “antimacrismo” entre los principales factores de poder local e internacional el rechazo al oficialismo obedece a una gran decepción ante la debacle de un presidente/empresario a quien asumían como “propio” y a la catastrófica pérdida de valor de sus operaciones y empresas en el mercado local e internacional.
Sin embargo, más allá del contundente respaldo y esperanza popular que obtendrá y hoy representa Frente de Todos, no es atinado creer que el camino que transitará el futuro gobierno sera un agradable lecho de rosas. La debacle política y especialmente socioeconómica que dejará como legado y herencia la fallida experiencia macrista es, lamentablemente, mucho peor a la que recibió Nestor Kirchner al asumir su presidencia en 2003.
Cuando se cierra una etapa de gobierno neoliberal, desde la recuperación democrática en 1983, siempre aparecen dos temas 1 dolarizacion de la economía y 2 emergencia alimentaria . Obvio que son rituales, típicos de fin de ciclo catastrófico y como tal deben ser considerados. 🤷♂️— Artemio López (@Lupo55) 10 de septiembre de 2019
En aquel momento, el nuevo gobierno asumió sus atributos, realizado ya el “trabajo sucio” durante la gestión Duhalde. Hoy, no hay default declarado, soja a u$s 600 dolares por tonelada, ni superavits gemelos en las cuentas públicas, bases de la recuperación de la confianza en nuestra economía, que caracterizó el mandato del ex presidente santacruceño.
Si bien se aprecia una nueva estabilidad del dólar esta, al igual que la registrada antes de las PASO, es ficticia y anuncia infelizmente graves turbulencias en la economía que podrían llegar antes de Diciembre. La contínua pérdida de reservas en el BCRA y la plena vigencia del perverso esquema de financiamiento público de cortísimo plazo llamado leliqs, en el marco de una recesión que cumplirá 2 años de vida, desatan el temor ante una nueva hiperinflación que lastime aún más los flacos y sufridos bolsillos de los argentinos, panorama extremamente grave y delicado que no desconoce el futuro presidente.
"Los primeros años van a ser difíciles xq vamos a recibir una economía muy diezmada y un escenario internacional poco fácil. Vamos a luchar contra el hambre y la pobreza q hoy aqueja a la Argentina, vamos a poder devolver el trabajo y recomponer el salario" @alferdez pic.twitter.com/iz0r7gWRS1— Walter D Valdez Lettieri (@WDVL4) 10 de septiembre de 2019
Los primeros 180 días de Gobierno, serán claves para edificar con éxito un sendero de gradual recuperación económica, que incluya nuevamente a grandes sectores sociales hoy excluidos por las políticas del gobierno. Tal período no será una luna de miel, sino un tiempo de febriles negociaciones políticas e institucionales, que requerirán de un amplio acuerdo político, social e internacional..
"Tenemos q ponernos de acuerdo entre todos para q en 180 días podamos recomponer salarios sin q signifique mayor inflación. Espero mañana hablar con el Pdte. de la UIA, para mí la industria es central, tenemos q hacer un acuerdo con los industriales y el campo" @alferdez pic.twitter.com/MFMUr1mLel— Walter D Valdez Lettieri (@WDVL4) 10 de septiembre de 2019
Resultará vital que, al menos durante el primer año de mandato del nuevo gobierno, no estalle una feroz interna política en el Frente de Todos, construcción plural que tendrá la muy delicada tarea de desactivar diversas bombas de tiempo en el marco de una previsible presión social que le demandará, en el marco de una previsible puja distributiva, el cumplimiento de sus promesas electorales.
Es de esperar una gran ofensiva de las elites desplazadas del poder, para encorsetar y condicionar el margen de maniobra del futuro gobierno popular, que solo la paciencia, liderazgo político y aunque más no sea pequeños resultados concretos en materia de recuperación de los sectores postergados, podrán equilibrar si no mellar la legitimidad y esperanza social de la administración Fernández, durante el nacimiento mismo del nuevo gobierno.
De cara a un futuro más mediato, quedará también otra dura e imprescindible tarea por delante: desterrar los viejos e inútiles dogmas que nos han llevado nuevamente a este rotundo fracaso, donde el repetido hasta el hartazgo ajuste fiscal, solo multiplicó la pobreza, sin que lleguen las inversiones prometidas ni menos aún logre bajar la inflación.
Será necesario articular un debate político maduro y responsable, que consolide un rumbo económico y social definido para nuestro país y que contribuya a desterrar el esquema discursivo que nos llevó al fracaso, pues ninguna política económica es viable ni sustentable, sin legitimidad popular.
Publicado en:
https://valdezlettieri.wordpress.com/2019/09/10/ya-fue/
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