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lunes, 9 de enero de 2012

Un error y sus consecuencias, por Alejandro Horowitz (para “Tiempo Argentino” del 09-01-12)

Arriba : En acción : Macri con la camiseta de Boca, y Scioli con los colores de su agrupación

De fútbol y política


Publicado en TIEMPO ARGENTINO el 9 de Enero de 2012

Por Alejandro Horowicz
Periodista, escritor y docente universitario.

Pocas veces un modesto partido de fútbol 5 logró tanta prensa, a resultas de un sentido potencial mayor: poner en marcha la lógica de la interna; tanto en el oficialismo, como en la oposición.

En el bosque de los signos el gobernador de la provincia de Buenos Aires cometió un error: transparentar su juego. En política, el manejo de los tiempos no es un asunto menor. Sobre todo cuando tantos ojos ralentan su mirada en la figura de Daniel Scioli y esperan que haga o deshaga para actuar en consecuencia. Pocas veces un modesto partido de fútbol 5 logró tanta prensa, a resultas de un sentido potencial mayor: poner en marcha la lógica de la interna; tanto en el oficialismo, como en la oposición. Haciendo saber, al mismo tiempo, que no se trataría de espacios previamente delimitados, sino que al interior del oficialismo se jugarían ambos partidos; igual que en la canchita donde Mauricio Macri fuera derrotado.
No se trata de saber cuántos convencionales tendría el gobernador en el próximo congreso partidario. La batalla por el 2015 (que se inicia desde esta lectura, con el silbato del réferi) no se dirimirá en tan circunscripto terreno. Será más bien en el espacio de la acción política diaria, de la acción de gobierno, donde los bandos dibujarán las nuevas camisetas; y donde tirios y troyanos se jurarán odio o amor para una brevísima eternidad.
En una sola movida el gobernador –un deportista devenido dirigente político de la mano de Carlos Menem– movió todas las piezas del tablero oficial.
¿En contra? ¿A favor? Veremos.
Si se quiere, Scioli es casi el único sobreviviente del museo político anterior al estallido de 2001, al menos, el único en condiciones de disputar la nominación presidencial de 2015, ya que tanto Eduardo Duhalde como Elisa Carrió se tuvieron que acoger a los beneficios de la jubilación anticipada. Sobre los gobernadores de la provincia más pesada, de todas las que conforman el mosaico nacional, opera una especie de maldición gitana. Maldición que impide a su gobernador sentarse en la poltrona de Rivadavia, al menos por voto popular directo.
El motivo viene a cuento. No sólo se trata de la provincia que posee el padrón electoral decisivo, además dispone de las tierras más feraces en actividad. Primera curiosidad. Alcanzar una diputación parlamentaria en representación de Pergamino –para mentar una localidad suficientemente conocida– requiere menos votos que obtenerla en La Plata. Dicho de un tirón: la Pampa Húmeda y sus intereses están sobrerepresentados y los de los hombres y mujeres de a pie disminuidos. Por cierto, esto no alcanza para volver la cuestión electoral una cáscara vacía, pero permite que el fiel de la balanza se incline previamente en clarísima dirección.
Segunda curiosidad. En ese modelo de fuerza reposa también la naturaleza de su debilidad. A saber, la provincia que no debiera tener ninguna clase de carencias, sus posibilidades tributarias vía el impuesto territorial son simplemente fantásticas, guarda toda la paleta de pobreza que la estadística permite contabilizar. Es que el impuesto a la renta de la tierra entre 2001 y la fecha prácticamente no ha sido modificado (unos 22 dólares por hectárea) y cada vez que el congreso provincial intentó la proeza de subirlo, el lobby de la Mesa de Enlace logró siempre detenerlo en el despacho del gobernador.
Tercera curiosidad. Para no tener “problemas” con los estancieros de la Pampa Húmeda (para hacerles la vida más fácil, no cobrar impuestos en serio) Scioli pasa a depender del flujo del gobierno central. Sin ese decisivo aporte la gobernabilidad de la provincia se vuelve errática. De ahí que no pueda darse el lujo de tener ninguna clase de conflicto con el Poder Ejecutivo, y debemos decir que hasta hoy esa cautela funcionó.
Cuarta curiosidad. El peso específico de la provincia de Buenos Aires provoca –en las demás– una suerte de consecuencia posicional: resisten su movimiento, ya que lo leen como presión política. Cuando el gobernador juega al fútbol con Macri, con Cristina Fernández recién operada, la decodificación –¿más allá de la voluntad de Scioli?– resulta intimidante. Dos distritos electorales que definen, con dos dirigentes con “buena sintonía”, una tradición compartida –después de todo Macri también ingresó a la política por sugerencia de Carlos Menem–, permite trazar una línea de puntos comunes. Esto es, una potencial confluencia que los analistas siempre consideraron, y que en los entourages de ambos dirigentes cuenta con defensores de peso. Todos los demás jugadores del espacio oficial leen: maniobra enemiga, y se atrincheran detrás de Amado Boudou. Así lo hizo el vicegobernador bonaerense, y junto con él –al menos mentalmente– el resto del tándem oficial. Ningún dirigente político sensato favorece semejante constelación de fuerzas antagónicas. En todo caso, ese no es el camino de la victoria, sino más bien un punto de realineación de sus enemigos. Adentro y afuera.

DESDE LA OTRA TRINCHERA.

Para Mauricio salir con la camiseta de Boca, con Scioli, a la cancha sonó a victoria. Todos los íconos que los fotoperiodistas aman en una sola postal: una nueva fórmula presidencial comienza a instalarse, y la estamos registrando en camiseta. Un montaje al que Duran Barba no es precisamente ajeno. Escenario PRO sin globos.
Sin embargo, por debajo y por detrás de la canchita, los molinetes del subte marcan el compás de la dinámica política. Macri anunció el “aumento” del boleto que los porteños decodificaron “tarifazo”. Para enfrentarlo el arco opositor cobra insólita flexibilidad; arranca en el kirchnerismo, pasa por los trabajadores del subte, suma a las dos corrientes en que se divide la CTA, logra que Facundo Moyano adhiera y que el Frente de Izquierda los respalde. Mientras las redes sociales bullen, y los vecinos progres retoman la actividad opositora. El verano porteño se puso hot.
Durán sonríe desdeñoso, ese arco ya lo tuvimos que soportar y sirve para convencer a los “vecinos” de las bondades amarillas. ¿Qué se creyeron –razona– que Macri subvencionaría el transporte? Nadie ignora que el boleto es insólitamente barato, entonces, el aumento estaba fuera de cuestión. Y si debemos aumentar, y pagar el costo político, lo haremos en serio y listo. Esa es –detalle más, detalle menos– la línea PRO.
Para vencer a Macri en la rica Buenos Aires se está construyendo una suerte de frente único. De su continuidad depende la derrota del macrismo, y para que resulte posible, es preciso evitar la binaria lógica anti K. Ese frente tiene la posibilidad de quebrar una peligrosa hegemonía conservadora, de constituirse a la izquierda del gobierno.
Un grupo de intelectuales produjo un texto atrapado por esa lógica binaria. Lanzado al ruedo cosechó diversas firmas, entre ellas la de Beatriz Sarlo. Consternados los autores terminaron retirando sus firmas, para no compartir tan “incómoda” adhesión. Es una lectura mal hecha, elide una pregunta clave: ¿Qué permite el apoyo de Sarlo a Plataforma 2012? ¿Cuál debilidad textual, es decir teórica, facilita que se cuelen respaldos indeseados?
La idea de que primero es el verbo, de tradición bíblica, produce efectos funestos. Sólo una comprensión capaz de adelantarse a la marcha de los hechos facilita la confluencia con el movimiento real. En todo caso, cuando el movimiento emerge acompañarlo, y desde allí –sin la pretensión de los maestritos ciruela– ayudarlo a encontrar su propio norte. Hace muchos años Marx explicó que un movimiento en la realidad resulta más importante que 100 programas, vencer al partido del orden –Macri en Capital– modificaría el sistema político realmente existente. Esa es la palanca del pensamiento crítico, lo demás empuja a la lógica binaria, al más rancio gorilismo tradicional.

Publicado en :

http://tiempo.infonews.com/notas/error-y-sus-consecuencias#.Twr6SQmpSdB.facebook

1 comentario:

Paulo Esperon dijo...

Hola, te escribo desde La Hoja para preguntarte si te interesa participar de nuestro diario publico. Podes exponer tus contenidos a una variada audiencia que comparte tus artículos y pasa por tu blog.
Espero encuentres esto útil y si conoces a alguien a quien le pueda servir, pasa la voz!

Un abrazo.
Paulo Esperon
http://lahojanews.com/queslahoja/

Pd: Para ahorrar tiempo he copiado y pegado este mensaje en tu blog ☺