Jueves 21 de Marzo
Se congregaron frente al Palacio de Justicia contra las operaciones oficialistas contra el magistrado que lleva la causa por extorsión contra Stornelli.
Con la presencia de Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, jueces, fiscales, intelectuales y artistas, miles de personas marcharon hasta los tribunales del centro porteño para expresar su apoyo al juez Alejo Ramos Padilla.
En Dolores, donde tiene su competencia federal el magistrado, también se realizó una movilización en su apoyo.
Ramos Padilla sufre por estos dias diversas operaciones políticas, judiciales y mediáticas motorizadas por el gobierno de Cambiemos (con ayuda de parte del Poder Judicial y los medios socios del oficialismo), que busca de todas las formas que no avance la causa por extorsión contra el fiscal Carlos Stornelli.
La manifestación en apoyo del magistrado comenzó a las 19 en la plaza de Talcahuano y Lavalle, frente al palacio de Tribunales. En simultáneo se realizó otra manifestación en Dolores, que salió de la plaza Castelli de esa ciudad y marchó hacia el edificio del juzgado federal.
Luego de la presentación del juez ante la Comisión de Libertad de Expresión de Diputados, donde entregó numerosas cajas con información vital sobre la causa, la Casa Rosada comenzó una campaña que llega al punto de haber pedido el juicio político contra el magistrado.
Publicado en:
http://www.infonews.com/nota/322431/miles-de-personas-marcharon-a-tribunales
Mira, Adrián, estuve en esa plaza de Tribunales ayer y me surgieron varias reflexiones que comparto por si sirven de algo.
ResponderEliminarCuando salí de la boca del subte de Congreso a las 18.10 horas, me encontré con parte del cerco policial disuasorio dispuesto obviamente durante la exposición de Ramos Padilla en la Comisión (14 carros de asalto, 1 camión hidrante, una decena de motos y profusa infantería armada hasta los dientes). No había permiso oficial de manifestar, lo sabemos.
Por el contrario, en Tribunales, no había uniformado alguno y muy sobre la noche, 21.30, apareció un miserrimo patrullero.
La composición etaria y sociocultural de los presentes en Tribunales era llamativa: profesionales liberales, docentes de nivel superior, periodistas, etc., todos de entre 50 a 80 años con claras trayectorias encima. Escasisimos jovenes y nada de organicidad.
La pregunta que campeaba sin cesar era...¿Por qué somos tan pocos? ¿Por qué no hay apoyo de partidos orgánicos? Porque no éramos tantos, en serio. Yo y todos los presentes esperamos una reacción ciudadana más masiva. Pero está claro que todavia muchos esperan de una sola persona, por caso, un juez federal honesto, que peticione aquello que con fuerza de numero no supimos solicitar con más fuerza.
Y la verdad es que ese interrogante (¿Por qué esto no fue un desborde de gente?) se responde solo.
La falta de permiso oficial para la circulación de columnas es una de varias respuestas (habría sido suicidio partidario enfrentar a la policía de Larreta que esperaba precisamente que se contraviniera la disposición oficial en la modalidad de la contravencion urbana).
Pero también hay otra conclusión. Los gobiernos de Néstor y Cristina supieron dar orden benévola a las policías que permitieron durante 12 años la sumatoria aluvional de personas sueltas y la independiente potestad de los organicos de circular y agruparse a su antojo.
No se si esa facilidad para sumarse sin el compromiso de la organicidad (para el caso de los "sueltos") no termino siendo un boomerang en el largo plazo.
Como decía por otro lado, resulta casi una ingenuidad que los inorgánicos que se sustraen de componer colectivo con objetivos y determinación, esperen la concurrencia auxiliadora de quienes no tienen prurito alguno en constituirse agrupación declarada. Ese razonamiento aún entre gente más que ilustrada, curiosamente, está faltando.
Todos llevamos la marca alienante del Neoliberalismo. Esa que nos hace confluir ante un disparador, de forma epidermica, olvidando la idea de proceso, de construcción paulatina sin pausa ni desmayo. Y hasta que no nos comprometamos con una idea, más que con una persona (por más magnética e inusual que sea esta última), hasta que no le pongamos cuerpo a una utopía sin pedirle contraprestación efectiva (ese resabio consumidor de objetos materiales e inmateriales que nos ha traspasado involuntariamente), no vamos a lograr deconstruir la tremenda maquinaria disuasoria de lo gregario potente.
Saludos cordiales.