Imagen de MICAELA PÉREZ
Para la ensayista y escritora, el Presidente dejará una Argentina más injusta, pobre y desigual. Y opina que su eventual reelección dependerá de la capacidad del peronismo de rearmarse para ofrecer una alternativa distinta a Cristina. En caso de que no lo logre, dice, la expresidenta "seguirá siendo la supporting actress" de Macri permitiendo su continuidad.
Por MICAELA PÉREZ
Sarlo:
"Para el macrismo yo no existo", dijo alguna vez Beatriz Sarlo para explicar la impresión casi indiferente que producían sus críticas cada vez más punzantes al gobierno actual, en contraste con el impacto que cada uno de sus agudos dardos causaba en el corazón del poder en tiempos de Cristina Kirchner y que hacía que el kirchnerismo en pleno saliera a responderle con artillería pesada. Será porque la intelectualidad vernácula ha perdido el peso que supo conseguir en la Argentina de los K, o porque al macrismo simplemente no le interesa esa dialéctica confrontativa, lo cierto es que Sarlo, una de las intelectuales más lúcidas de la Argentina, tiene aún mucho para decir sobre el país de Macri, la escuche, o no, el poder.
¿Cómo estás viendo el debate por el aborto que arrancó esta semana en el Senado?
-No hay votos todavía y, además, a diferencia de Monzó como presidente de la Cámara de Diputados, que no se conoció su voto porque no hubo necesidad de desempate, uno sabe cuáles son las preferencias ideológicas de Michetti y de un senador orgánico del PRO, como Pinedo, y otro que fue electo recientemente, como Esteban Bullrich. O sea, la fuerza que se va a imprimir para decidir esos 11 votos, que creo que son los que están indecisos, es grande. Nosotros lo vimos a Pichetto hace unos días y él tenía mucha confianza en que la ley pudiera salir sin modificaciones, porque si sale con modificaciones, olvidémonos, el proyecto tiene que volver a Diputados y hay que volver a votar. Pichetto se mostraba optimista, lo cual me dejó relativamente tranquila, porque tiene una enorme experiencia. Pero los 11 votos que faltan hay que ganarlos y no sé si son votos que puedan ser tan influidos por la movilización de la opinión pública. Creo que los votos de diputados pudieron ser influidos por esa movilización.
Hay cambio de posiciones, de todos modos. Cristina siempre se opuso, pero anunció que votará a favor.
[14/7 22:08] Adrian Corbella: -En el caso de Cristina es un cambio, pero nunca había dicho en este proceso qué iba a votar. Es un cambio de ella, que estaba en contra del aborto, no de votos. Y me parece que en el Senado también hay que poner en la balanza que aún no se ve operar a figuras tan inteligentes del lado del PRO como Lospennato y Lipovetsky, que fueron muy importantes en el desguace de los votos del PRO en Diputados. En el Senado no veo esa dinámica intelectual política que tuvieron estos dos diputados.
Ahora, más allá del oportunismo político de impulsar este ley en momentos en los que el Gobierno no puede exhibir resultados económicos, ¿hay algún "mérito" en Macri al haber habilitado el debate? Porque no es un gobierno del que uno hubiera esperado temas propios de la agenda progresista.
-Están los que dicen que por indicación de su equipo más cercano, habilitó el debate para tener un gran tema en agenda que no sean los temas económicos. Y el macrismo siguió esa indicación. ¿Por qué la siguió? Ahí si uno tiene que desarrollar hipótesis: el carácter ideológico de Macri es muy fuerte, si bien él se pronunció contra el aborto en su momento, su carácter aideológico, esa especie de libre juego ideológico hace que no tenga principios fundamentales. Cuando Cristina se oponía al aborto, creo que eran ideas de ella, educada en colegio religioso o vaya a saber por qué; esa es una hipótesis: Macri es alguien muy aideológico, por tanto, aunque no le guste el aborto, si tiene que habilitar el debate, lo habilita; o confía en que él tiene una mayoría en Cambiemos que no lo vota...
Esta última es un poco la explicación que da Carrió:...
-Confiaba en que él tenía una mayoría más sólida de la que tenía en Cambiemos, justamente porque su mente tiene esa especie de desnudez ideológica, ética y moral, esa es otra cuestión a considerar. La tercera hipótesis es que Macri se ha dado cuenta de que no va a mejorar su relación con el Papa. El Papa ya no vino a la Argentina, entonces Macri dice por qué me estoy preocupando tanto por una autoridad moral mundial que a mí no me devuelve nada. Eso también tendría ver con la posición aideológica de Macri, no está ni en contra ni a favor del Papa, le gustaría tenerlo de su lado, pero ya sabe que no lo tiene.
Dijiste en otra entrevista, "a mí Macri no me gusta, pero no importa. Importa cómo gobierna y qué Argentina va a dejar". A tres años de Gobierno, ¿qué Argentina creés hoy que va a dejar Macri?
-Creo que es una Argentina donde las condiciones de injusticia en la desigualdad de la riqueza se acentúan enormemente, donde el problema fundamental de esa Argentina, que es el 30% de pobres y dentro de ellos los chicos y los jóvenes, sigue intacto o en crecimiento, y cuyas consecuencias finales las vamos a ver dentro de unos años, como con el menemismo. ¿Por qué las capas medias votaron masivamente al menemismo en 1995? ¿Cómo fue reelegido Menem? Las consecuencias se tuvieron que ver después de esos cuatro primeros años de Gobierno; entonces yo creo que esas consecuencias ya están en las encuestas, en los números, en los estudios, pero cuando empecemos a verlas, como en el 95 empezamos a ver a los cartoneros, vamos a verlas en la trama.
¿A qué te referís?
-Se está destruyendo lo que fue una trama argentina muy tradicional, que tenía que ver con las pequeñas empresas, los trabajadores independientes, no sólo con los obreros en las grandes empresas, esa es una trama muy tradicional de la Argentina que hacía que se diferenciara el país de los otros países de América latina. Hoy los números de la Argentina son parecidos a los de otros países de la región en términos de pobreza y de exclusión. La diferencia en el rendimiento de los estudiantes entre los que van a las escuelas de centros urbanos de capas medias y medias bajas y los de escuelas particulares, y de los que van a las escuelas de los centros suburbanos, es terrible. Es decir, en términos que ya no se arreglan, como ya no se arregla la pobreza que dejó Menem. O sea que van a pasar muchas décadas antes de arreglar esa pobreza.
Macri llegó al poder justamente con la promesa de "pobreza cero", e incluso pidió que su Presidencia sea juzgada por la cantidad de pobres que va a dejar.
-Uno puede decir "hambre cero", que es la frase de Lula, pero "pobreza cero" es disparatado, porque tiene que ver con cómo se la mide, en Alemania la pobreza se mide por la mitad del salario básico. Todo lo que dijo Macri al principio uno tiene que pensar si lo dijo por ignorancia, por hipocresía o por cinismo. Quizá sea una combinación de las tres. Lo de la ignorancia es extraño, de todas maneras, ya que los economistas hoy se conocen todos entre sí, no podía ser que él no conociera los datos de la Argentina, que además el Observatorio Social de la Iglesia los ponía sobre la mesa semanalmente. Entonces, uno tiene que ir a ver la hipocresía de las promesas electorales y el cinismo de decir, "bueno, me votan y vamos a ver qué hacemos".
La clase media y los sectores populares que lo votaron y aceptaron esa suerte de contrato inicial de "sacrificarse hoy para estar mejor mañana" están cada vez más descreidos. ¿Qué pensás que va hacer Macri para retenerlos, ya que los necesita ser reelecto?
-Lo que tiene es a Cristina. Macri quiere mantener a Cristina como supporting actress, en el sentido pleno de la palabra supporting actress: es la actriz que lo va a soportar en una próxima elección. Ahí hay que pensar qué decide hacer el peronismo, porque si Cristina puede seguir siendo la supporting actress de Macri es porque el peronismo no está en condiciones políticas ni organizativas de presentar otra alternativa.
Para el peronismo el sueño de volver al poder en 2019 no parece tan inalcanzable como cuando Macri ganó la legislativa y se daba por hecho su reelección. Ahora, con Barrionuevo de interventor tampoco la tienen fácil en el PJ...
-Pero el peronismo ya tuvo reuniones por su lado, creo que Barrionuevo no va a quedar colgado de una bandera burocrática donde está, sino que va a volver a reubicarse si el peronismo logra unificarse por otro lado. Depende de la fuerza que tenga el kirchnerismo ahí para imponer a CFK. Si va a una interna, posiblemente la gane, y por tanto Macri va a tener barato un nuevo contrato con su supporting actress. Ahora, si bien las elecciones del 19 son importantes, me preocupa pensar las cosas no perdiendo la temporalidad de los 10 años de Menem, que es algo que las capas medias tendrían que volver a pensar: cuando le entregaron su voto por segunda vez, y lo entregaron porque había convertibilidad, el dólar estaba uno a uno, porque se iban a Miami... Pensar que esas temporalidades largas, en el caso de Menem, dejaron un país desconocido hasta ese momento. Y el que va a quedar ahora va a ser un país peor que el que dejó Menem.
En la danza de presidenciables se habla de Lavagna, a quien Duhalde impulsa públicamente. Una suerte de presidente de transición, por cuatro años y como candidato de un gran frente.
-Lo ignoro, puede ser una idea de Duhalde, porque él hizo la mejor experiencia con Lavagna. Fue Duhalde quien lo llamó y después se lo transfirió a Kirchner, y creo que fueron los mejores años económicos para salir de la crisis anterior. Tengo un enorme respeto desde el punto de vista de lo que Lavagna hizo como ministro de Economía. Si me obligan a contestar, diría Lavagna no va a tomar el camino de ser candidato, aunque quizás lo que sería muy bueno para la Argentina es que un candidato presidencial lo tuviera a Lavagna como garantía.
Lo tuvo Massa y no le alcanzó.
-Pero tiene que tenerlo el peronismo. Si Lavagna aceptara ser la garantía de un plan económico sería excelente. Las condiciones que encontró Lavagna fueron verdaderamente terribles. ¡Que no me hable Macri que encontró condiciones terribles! Y el país ya en 2003 estaba creciendo.
Conoces mucho a Carrió, ¿cómo analizás sus últimos deslices mediáticos? Pedirle a la clase media que dé "propinas y changas"...
-Mientras ella se mueva dentro de las franjas de las capas medias, que son las que puede asegurar, incluso diciendo las barbaridades de "las propinas y las changas", ahí va a estar su futuro. Carrió mantiene algunas de sus cualidades: es excelente en los medios y tiene un temperamento que evidentemente a la Argentina le gusta en sus mujeres políticas. Carrió es muy parecida en su temperamento a Cristina. Al argentino le gustan esas mujeres políticas televisivas. Tiene el tiempo y lo caliente que la TV pide y se parece a CFK en la necesidad de autorreferenciar todo problema. Y le ha ido bien con su estilo, como a Cristina.
Tan confusa está la política que hoy hasta se habla de una eventual candidatura de Tinelli. ¿Ves factible que esto ocurra en la Argentina?
-Si EE.UU. lo votó a Trump, que mete al país más grande del mundo en una guerra comercial con el segundo país más grande, pienso que cualquier desastre puede pasar y que nadie está libre.Trump hizo un discurso dirigido a aquellos que no se sentían representados por la política y aquellos que no se sentían representados por la política se sintieron representados inmediatamente por Trump. Que aprendan los políticos a hacer un discurso político en el cual la gente por lo menos entienda de qué se está hablando, no se puede hablar todo el día de las lebacs y las letes cuando se habla de política. Los políticos tienen que aprender a dar un interés público en su discurso, esa es la cuestión. Si los políticos no aprenden se los va a dar Tinelli. ¿Me voy a escandalizar si EE.UU. está gobernado por Trump? Si en el país más grande del mundo eso puede suceder también ese desastre puede suceder en la Argentina. ¿Por qué no?
El escándalo y la maternidad de las celebrities, dos caras de la misma moneda
Beatriz Sarlo está a punto de publicar su nuevo libro, La intimidad pública, donde analiza con la agudeza que la caracteriza el escándalo y la maternidad de los famosos ventilada a la luz pública como síntomas de la época actual. "El escándalo se me apareció un día en la repetición, ya sea en la TV o en las redes, de un mismo argumento: "Yo lo amé, él me traicionó", o "ella me traincionó, yo la amaba, volvimos a estar juntos". La repetición de un argumento muy pobre y su construcción como el argumento que hace funcionar todo lo demás. Percibí que los protagonistas del escándalo pasaban casi sin transición a una especie de idilio con el nacimiento de un nuevo hijo. Y para mostrar el proceso que conducía a ese nacimiento, se sacaban fotos muy parecidas a las del escándalo: los pechos, los traseros, los vientres aparecían del mismo modo. Y, además, que apareciera el embarazo como tema tenía que ver con nuevas formas de la estructura física atractiva de las mujeres. Si vos pensás en la década del 60, de la modelo Twiggy, o de la argentina Claudia Sánchez, esos cuerpos no se favorecían con el embarazo, siendo el ideal de extrema delgadez, el embarazo era algo que acontecía como un evento que no entraba dentro de la estética de esos cuerpos. Ahora uno diría que con la estética de los cuerpos de las cirugías estéticas y los implantes, el embarazo del presente es muy afín.
¿Por qué el tema de la maternidad cuando se discute hoy en la Argentina la despenalización del aborto?
-Ése parece ser el tema de una fracción del pensamiento. Hay una línea del feminismo nortamericano que reinvindica la maternidad como un poder que tienen las mujeres y no los hombres. Un camino peligroso, porque empieza a practicarse la maternidad como algo que da poder, no como algo que puede llegar a establecer límites, costar mucho, encerrar a las mujeres en determinado territorio. La idea de la maternidad como algo sólo feliz y poderoso atraviesa ciertas zonas del feminismo de derecha y llega a celebridades locales. Mujeres aparentemente muy independientes, de repente expresan sentimientos que parecen de finales del siglo XIX, del romanticismo. Y los hombres, sus nuevas parejas, es notable como se incorporan inmediatamente.
Dixit
"Macri es alguien muy aideológico, por tanto, aunque no le guste el aborto, si tiene que habilitar el debate, lo habilita; o confía en que él tiene una mayoría en Cambiemos que no lo vota"
"Si Cristina va a una interna en el peronismo, posiblemente la gane, y Macri va a tener barato un nuevo contrato con su supporting actress"
"Creo que Lavagna no va a ser candidato, aunque sería muy bueno para la Argentina que un candidato presidencial lo tuviera a él como garantía de un plan económico"
"Los políticos tienen que aprender a dar un interés público en su discurso. No se puede hablar todo el día de las lebacs y las letes. Si los políticos no aprenden, se los va a dar Tinelli", por Micaela Pérez (para "El Cronista" del
Para la ensayista y escritora, el Presidente dejará una Argentina más injusta, pobre y desigual. Y opina que su eventual reelección dependerá de la capacidad del peronismo de rearmarse para ofrecer una alternativa distinta a Cristina. En caso de que no lo logre, dice, la expresidenta "seguirá siendo la supporting actress" de Macri permitiendo su continuidad.
Imagen de MICAELA PÉREZ
Por MICAELA PÉREZ
Sarlo:
"Para el macrismo yo no existo", dijo alguna vez Beatriz Sarlo para explicar la impresión casi indiferente que producían sus críticas cada vez más punzantes al gobierno actual, en contraste con el impacto que cada uno de sus agudos dardos causaba en el corazón del poder en tiempos de Cristina Kirchner y que hacía que el kirchnerismo en pleno saliera a responderle con artillería pesada. Será porque la intelectualidad vernácula ha perdido el peso que supo conseguir en la Argentina de los K, o porque al macrismo simplemente no le interesa esa dialéctica confrontativa, lo cierto es que Sarlo, una de las intelectuales más lúcidas de la Argentina, tiene aún mucho para decir sobre el país de Macri, la escuche, o no, el poder.
¿Cómo estás viendo el debate por el aborto que arrancó esta semana en el Senado?
-No hay votos todavía y, además, a diferencia de Monzó como presidente de la Cámara de Diputados, que no se conoció su voto porque no hubo necesidad de desempate, uno sabe cuáles son las preferencias ideológicas de Michetti y de un senador orgánico del PRO, como Pinedo, y otro que fue electo recientemente, como Esteban Bullrich. O sea, la fuerza que se va a imprimir para decidir esos 11 votos, que creo que son los que están indecisos, es grande. Nosotros lo vimos a Pichetto hace unos días y él tenía mucha confianza en que la ley pudiera salir sin modificaciones, porque si sale con modificaciones, olvidémonos, el proyecto tiene que volver a Diputados y hay que volver a votar. Pichetto se mostraba optimista, lo cual me dejó relativamente tranquila, porque tiene una enorme experiencia. Pero los 11 votos que faltan hay que ganarlos y no sé si son votos que puedan ser tan influidos por la movilización de la opinión pública. Creo que los votos de diputados pudieron ser influidos por esa movilización.
Hay cambio de posiciones, de todos modos. Cristina siempre se opuso, pero anunció que votará a favor.
[14/7 22:08] Adrian Corbella: -En el caso de Cristina es un cambio, pero nunca había dicho en este proceso qué iba a votar. Es un cambio de ella, que estaba en contra del aborto, no de votos. Y me parece que en el Senado también hay que poner en la balanza que aún no se ve operar a figuras tan inteligentes del lado del PRO como Lospennato y Lipovetsky, que fueron muy importantes en el desguace de los votos del PRO en Diputados. En el Senado no veo esa dinámica intelectual política que tuvieron estos dos diputados.
Ahora, más allá del oportunismo político de impulsar este ley en momentos en los que el Gobierno no puede exhibir resultados económicos, ¿hay algún "mérito" en Macri al haber habilitado el debate? Porque no es un gobierno del que uno hubiera esperado temas propios de la agenda progresista.
-Están los que dicen que por indicación de su equipo más cercano, habilitó el debate para tener un gran tema en agenda que no sean los temas económicos. Y el macrismo siguió esa indicación. ¿Por qué la siguió? Ahí si uno tiene que desarrollar hipótesis: el carácter ideológico de Macri es muy fuerte, si bien él se pronunció contra el aborto en su momento, su carácter aideológico, esa especie de libre juego ideológico hace que no tenga principios fundamentales. Cuando Cristina se oponía al aborto, creo que eran ideas de ella, educada en colegio religioso o vaya a saber por qué; esa es una hipótesis: Macri es alguien muy aideológico, por tanto, aunque no le guste el aborto, si tiene que habilitar el debate, lo habilita; o confía en que él tiene una mayoría en Cambiemos que no lo vota...
Esta última es un poco la explicación que da Carrió:...
-Confiaba en que él tenía una mayoría más sólida de la que tenía en Cambiemos, justamente porque su mente tiene esa especie de desnudez ideológica, ética y moral, esa es otra cuestión a considerar. La tercera hipótesis es que Macri se ha dado cuenta de que no va a mejorar su relación con el Papa. El Papa ya no vino a la Argentina, entonces Macri dice por qué me estoy preocupando tanto por una autoridad moral mundial que a mí no me devuelve nada. Eso también tendría ver con la posición aideológica de Macri, no está ni en contra ni a favor del Papa, le gustaría tenerlo de su lado, pero ya sabe que no lo tiene.
Dijiste en otra entrevista, "a mí Macri no me gusta, pero no importa. Importa cómo gobierna y qué Argentina va a dejar". A tres años de Gobierno, ¿qué Argentina creés hoy que va a dejar Macri?
-Creo que es una Argentina donde las condiciones de injusticia en la desigualdad de la riqueza se acentúan enormemente, donde el problema fundamental de esa Argentina, que es el 30% de pobres y dentro de ellos los chicos y los jóvenes, sigue intacto o en crecimiento, y cuyas consecuencias finales las vamos a ver dentro de unos años, como con el menemismo. ¿Por qué las capas medias votaron masivamente al menemismo en 1995? ¿Cómo fue reelegido Menem? Las consecuencias se tuvieron que ver después de esos cuatro primeros años de Gobierno; entonces yo creo que esas consecuencias ya están en las encuestas, en los números, en los estudios, pero cuando empecemos a verlas, como en el 95 empezamos a ver a los cartoneros, vamos a verlas en la trama.
¿A qué te referís?
-Se está destruyendo lo que fue una trama argentina muy tradicional, que tenía que ver con las pequeñas empresas, los trabajadores independientes, no sólo con los obreros en las grandes empresas, esa es una trama muy tradicional de la Argentina que hacía que se diferenciara el país de los otros países de América latina. Hoy los números de la Argentina son parecidos a los de otros países de la región en términos de pobreza y de exclusión. La diferencia en el rendimiento de los estudiantes entre los que van a las escuelas de centros urbanos de capas medias y medias bajas y los de escuelas particulares, y de los que van a las escuelas de los centros suburbanos, es terrible. Es decir, en términos que ya no se arreglan, como ya no se arregla la pobreza que dejó Menem. O sea que van a pasar muchas décadas antes de arreglar esa pobreza.
Macri llegó al poder justamente con la promesa de "pobreza cero", e incluso pidió que su Presidencia sea juzgada por la cantidad de pobres que va a dejar.
-Uno puede decir "hambre cero", que es la frase de Lula, pero "pobreza cero" es disparatado, porque tiene que ver con cómo se la mide, en Alemania la pobreza se mide por la mitad del salario básico. Todo lo que dijo Macri al principio uno tiene que pensar si lo dijo por ignorancia, por hipocresía o por cinismo. Quizá sea una combinación de las tres. Lo de la ignorancia es extraño, de todas maneras, ya que los economistas hoy se conocen todos entre sí, no podía ser que él no conociera los datos de la Argentina, que además el Observatorio Social de la Iglesia los ponía sobre la mesa semanalmente. Entonces, uno tiene que ir a ver la hipocresía de las promesas electorales y el cinismo de decir, "bueno, me votan y vamos a ver qué hacemos".
La clase media y los sectores populares que lo votaron y aceptaron esa suerte de contrato inicial de "sacrificarse hoy para estar mejor mañana" están cada vez más descreidos. ¿Qué pensás que va hacer Macri para retenerlos, ya que los necesita ser reelecto?
-Lo que tiene es a Cristina. Macri quiere mantener a Cristina como supporting actress, en el sentido pleno de la palabra supporting actress: es la actriz que lo va a soportar en una próxima elección. Ahí hay que pensar qué decide hacer el peronismo, porque si Cristina puede seguir siendo la supporting actress de Macri es porque el peronismo no está en condiciones políticas ni organizativas de presentar otra alternativa.
Para el peronismo el sueño de volver al poder en 2019 no parece tan inalcanzable como cuando Macri ganó la legislativa y se daba por hecho su reelección. Ahora, con Barrionuevo de interventor tampoco la tienen fácil en el PJ...
-Pero el peronismo ya tuvo reuniones por su lado, creo que Barrionuevo no va a quedar colgado de una bandera burocrática donde está, sino que va a volver a reubicarse si el peronismo logra unificarse por otro lado. Depende de la fuerza que tenga el kirchnerismo ahí para imponer a CFK. Si va a una interna, posiblemente la gane, y por tanto Macri va a tener barato un nuevo contrato con su supporting actress. Ahora, si bien las elecciones del 19 son importantes, me preocupa pensar las cosas no perdiendo la temporalidad de los 10 años de Menem, que es algo que las capas medias tendrían que volver a pensar: cuando le entregaron su voto por segunda vez, y lo entregaron porque había convertibilidad, el dólar estaba uno a uno, porque se iban a Miami... Pensar que esas temporalidades largas, en el caso de Menem, dejaron un país desconocido hasta ese momento. Y el que va a quedar ahora va a ser un país peor que el que dejó Menem.
En la danza de presidenciables se habla de Lavagna, a quien Duhalde impulsa públicamente. Una suerte de presidente de transición, por cuatro años y como candidato de un gran frente.
-Lo ignoro, puede ser una idea de Duhalde, porque él hizo la mejor experiencia con Lavagna. Fue Duhalde quien lo llamó y después se lo transfirió a Kirchner, y creo que fueron los mejores años económicos para salir de la crisis anterior. Tengo un enorme respeto desde el punto de vista de lo que Lavagna hizo como ministro de Economía. Si me obligan a contestar, diría Lavagna no va a tomar el camino de ser candidato, aunque quizás lo que sería muy bueno para la Argentina es que un candidato presidencial lo tuviera a Lavagna como garantía.
Lo tuvo Massa y no le alcanzó.
-Pero tiene que tenerlo el peronismo. Si Lavagna aceptara ser la garantía de un plan económico sería excelente. Las condiciones que encontró Lavagna fueron verdaderamente terribles. ¡Que no me hable Macri que encontró condiciones terribles! Y el país ya en 2003 estaba creciendo.
Conoces mucho a Carrió, ¿cómo analizás sus últimos deslices mediáticos? Pedirle a la clase media que dé "propinas y changas"...
-Mientras ella se mueva dentro de las franjas de las capas medias, que son las que puede asegurar, incluso diciendo las barbaridades de "las propinas y las changas", ahí va a estar su futuro. Carrió mantiene algunas de sus cualidades: es excelente en los medios y tiene un temperamento que evidentemente a la Argentina le gusta en sus mujeres políticas. Carrió es muy parecida en su temperamento a Cristina. Al argentino le gustan esas mujeres políticas televisivas. Tiene el tiempo y lo caliente que la TV pide y se parece a CFK en la necesidad de autorreferenciar todo problema. Y le ha ido bien con su estilo, como a Cristina.
Tan confusa está la política que hoy hasta se habla de una eventual candidatura de Tinelli. ¿Ves factible que esto ocurra en la Argentina?
-Si EE.UU. lo votó a Trump, que mete al país más grande del mundo en una guerra comercial con el segundo país más grande, pienso que cualquier desastre puede pasar y que nadie está libre.Trump hizo un discurso dirigido a aquellos que no se sentían representados por la política y aquellos que no se sentían representados por la política se sintieron representados inmediatamente por Trump. Que aprendan los políticos a hacer un discurso político en el cual la gente por lo menos entienda de qué se está hablando, no se puede hablar todo el día de las lebacs y las letes cuando se habla de política. Los políticos tienen que aprender a dar un interés público en su discurso, esa es la cuestión. Si los políticos no aprenden se los va a dar Tinelli. ¿Me voy a escandalizar si EE.UU. está gobernado por Trump? Si en el país más grande del mundo eso puede suceder también ese desastre puede suceder en la Argentina. ¿Por qué no?
El escándalo y la maternidad de las celebrities, dos caras de la misma moneda
Beatriz Sarlo está a punto de publicar su nuevo libro, La intimidad pública, donde analiza con la agudeza que la caracteriza el escándalo y la maternidad de los famosos ventilada a la luz pública como síntomas de la época actual. "El escándalo se me apareció un día en la repetición, ya sea en la TV o en las redes, de un mismo argumento: "Yo lo amé, él me traicionó", o "ella me traincionó, yo la amaba, volvimos a estar juntos". La repetición de un argumento muy pobre y su construcción como el argumento que hace funcionar todo lo demás. Percibí que los protagonistas del escándalo pasaban casi sin transición a una especie de idilio con el nacimiento de un nuevo hijo. Y para mostrar el proceso que conducía a ese nacimiento, se sacaban fotos muy parecidas a las del escándalo: los pechos, los traseros, los vientres aparecían del mismo modo. Y, además, que apareciera el embarazo como tema tenía que ver con nuevas formas de la estructura física atractiva de las mujeres. Si vos pensás en la década del 60, de la modelo Twiggy, o de la argentina Claudia Sánchez, esos cuerpos no se favorecían con el embarazo, siendo el ideal de extrema delgadez, el embarazo era algo que acontecía como un evento que no entraba dentro de la estética de esos cuerpos. Ahora uno diría que con la estética de los cuerpos de las cirugías estéticas y los implantes, el embarazo del presente es muy afín.
¿Por qué el tema de la maternidad cuando se discute hoy en la Argentina la despenalización del aborto?
-Ése parece ser el tema de una fracción del pensamiento. Hay una línea del feminismo nortamericano que reinvindica la maternidad como un poder que tienen las mujeres y no los hombres. Un camino peligroso, porque empieza a practicarse la maternidad como algo que da poder, no como algo que puede llegar a establecer límites, costar mucho, encerrar a las mujeres en determinado territorio. La idea de la maternidad como algo sólo feliz y poderoso atraviesa ciertas zonas del feminismo de derecha y llega a celebridades locales. Mujeres aparentemente muy independientes, de repente expresan sentimientos que parecen de finales del siglo XIX, del romanticismo. Y los hombres, sus nuevas parejas, es notable como se incorporan inmediatamente.
Dixit
"Macri es alguien muy aideológico, por tanto, aunque no le guste el aborto, si tiene que habilitar el debate, lo habilita; o confía en que él tiene una mayoría en Cambiemos que no lo vota"
"Si Cristina va a una interna en el peronismo, posiblemente la gane, y Macri va a tener barato un nuevo contrato con su supporting actress"
"Creo que Lavagna no va a ser candidato, aunque sería muy bueno para la Argentina que un candidato presidencial lo tuviera a él como garantía de un plan económico"
"Los políticos tienen que aprender a dar un interés público en su discurso. No se puede hablar todo el día de las lebacs y las letes. Si los políticos no aprenden, se los va a dar Tinelli"
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https://www.cronista.com/3dias/Sarlo-El-pais-que-dejara-Macri-va-a-ser-peor-que-el-que-dejo-Menem-20180713-0003.html
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