Los opositores denunciaron penalmente a Mauricio Macri y Patricia Bullrich por la violenta represión a diputados y señalaron que se intentó impedir que ejercieran su mandato. Los oficialistas argumentaron que la oposición trató de obstaculizar la sesión.
Las fuerzas de seguridad reprimieron el jueves a varios diputados opositores y dificultaron su ingreso al Congreso.
Las fuerzas de seguridad reprimieron el jueves a varios diputados opositores y dificultaron su ingreso al Congreso.
La pulseada entre la oposición y el oficialismo en torno a la reforma previsional salió del ámbito de la Cámara de Diputados y sumó un capítulo anexo en otro escenario: los tribunales. Legisladores del Frente para la Victoria-PJ denunciaron penalmente al presidente Mauricio Macri y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, por el ataque que sufrieron representantes de la oposición por parte de policías y gendarmes el jueves en las inmediaciones del Congreso. En su presentación judicial remarcaron que la represión apuntó a impedir “que un conjunto de legisladores debidamente electos por la ciudadanía ejerciera su mandato”. Desde el oficialismo, en cambio, sostienen que fueron los opositores los que supuestamente de forma violenta obstaculizaron el debate en la Cámara baja e hicieron una denuncia para que se los investigue.
La denuncia del FpV-PJ lleva la firma del jefe de ese bloque, Agustín Rossi, y los diputados Martín Doñate y Rodolfo Tailhade. En su escrito, los legisladores advierte que lo ocurrido en torno al Congreso mientras se intentaba aprobar el recorte a las jubilaciones configurarían los delitos de resistencia a la autoridad, atentado al orden constitucional y la vida democrática y lesiones.
“La verdad es que esta denuncia la tendría que haber hecho el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, que debe velar por la seguridad de los diputados”, dijo a PáginaI12 Rossi. “Se vivió algo inédito en la Argentina, con el Congreso militarizado, siete legisladores heridos y más de 45 detenidos en lo que fue una cacería que se extendió por nueve horas”, agregó el jefe de la bancada del FpV-PJ, quien recordó que durante la candente discusión por la Resolución 125, en 2008, “no hubo operativo de seguridad y los productores agropecuarios entraron y salieron del parlamento durante 15 días”.
La denuncia apunta “a los agentes que intervinieron” en el operativo de seguridad”, pero pone énfasis en quienes les ordenaron de reprimir. Dice al respecto que todos los efectivos de las fuerzas de seguridad actuaron “bajo las ordenes de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich y del presidente de la Nación, Mauricio Macri, quienes pretendieron, a través de la represión, evitar que un conjunto de legisladores debidamente electos por la ciudadanía ejerciera su mandato”. Y añade que la represión estaba “destinada a manipular el eventual resultado de la sesión” de Diputados.
La causa quedó en manos de la jueza federal María Servini y el fiscal que interviene es Gerardo Pollicita. Los diputados del FpV-PJ solicitaron que sea allanado el Ministerio de Seguridad y que también se llame a declaración testimonial a los diputados Darío Martínez, Horacio Pietragalla, Matías Rodríguez y Juan Manuel Huss, todos diputados que fueron reprimidos. En la lista incluyeron, además, a Leonardo Grosso y Victoria Donda, quienes fueron heridos por efectivos de gendarmería durante la represión del miércoles último a integrantes de movimientos sociales que querían realizar una vigilia frente al Congreso.
Mendoza fue “salvajemente atacada por miembros de las fuerzas de seguridad”, recuerda la denuncia y consigna que el momento en que le arrojan gas pimienta en la cara, como pasó también con Pietragalla y Huss, “se pudo apreciar en las imágenes que circularon en los distintos medios de comunicación”. Rodríguez perdió el conocimiento por los golpes de la Gendarmería y tuvo que ser atendido por un equipo médico.
La denuncia de Cambiemos fue hecha por Elisa Carrió, Nicolás Massot, Miguel Bazze, Silvia Lospennato, Paula Oliveto Lago y Juan Manuel López, quienes nada dijeron de la violencia fuera del Congreso contra los manifestantes que fueron a rechazar el ajuste de las jubilaciones. Para ellos, “se vivieron hechos violentos” dentro del recinto por parte de diputados opositores “con el sólo fin de impedir que se llegue a alcanzar el quórum para dar inicio a la sesión y así obstaculizar el normal funcionamiento del Cuerpo”.
Los oficialistas mencionaron en su presentación que hubo “agresiones verbales” que “casi llegan a la violencia física” contra Monzó. “Muchos diputados se acercaron a su banca con el fin de increparlo, en un marco de violencia y agresiones nunca antes visto en nuestro Parlamento. Un ejemplo de ello fue la agresión perpetrada por el diputado Leopoldo Moreau”, relataron.
La denuncia de los diputados de Cambiemos omite que las imágenes que registraron los medios el jueves muestran al presidente de la Cámara de Diputados tratando de golpear a los opositores que fueron hasta su estrado a advertirle que había habilitado la sesión de manera irregular. Insiste, en cambio, en que la “violencia” de los opositores prendía “impedir que la sesión transcurra en un marco de normalidad, y puedan debatirse los proyectos de ley que figuraban en la citación” y que hubo un “plan organizado para atentar contra las instituciones públicas y el normal funcionamiento del Congreso y, por ende, de las instituciones democráticas y el orden constitucional”. Los oficialistas piden investigar “posibles responsabilidades penales derivadas de los hechos ocurridos durante la sesión” del pasado jueves y que “podrían implicar la comisión de los delitos tipificados en los artículos 211 y 241 del Código Penal”.
Publicado en:
https://www.pagina12.com.ar/83126-con-acusaciones-cruzadas-en-los-tribunales
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