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miércoles, 11 de marzo de 2015

ESPÍAS, JUECES Y PERITOS, por Conrado Yasenza (para "La Subjetiva" del 11-03-15)

La SI y después
A más de cincuenta días  de la muerte del fiscal especial para la causa AMIA, Natalio Alberto Nisman, hay varios planos que se disputan la escena:
a) La investigación que lleva a cabo,  desde el inicio, la fiscal Viviana Fein, y que fue caratulada como “muerte dudosa”.
b) el descabezamiento de la SI (Secretaría de Inteligencia) en el que fueron relevados el agente Antonio Horacio Stiuso, alias Jaime Stiuso/Stiles, quien desde 1972 presta sus oficios al espionaje vernáculo, junto a sus “jefes” formales,  Héctor Icazuriaga y Francisco Larcher.
c) la discusión sobre los servicios de inteligencia: Para qué sirven, cuáles son sus funciones,  cómo operará la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), creación tardía pero necesaria – ya aprobada por ley - en remplazo de la SI. Tarea ardua esta ya que es sabido que las estructuras de espías no se crean en un mes ni en un año, y que los espías nunca dejan de serlo.
En este punto es preciso tener en cuenta, como ejes a discutir una vez creada la AFI, las relaciones de los espías locales con los servicios de inteligencia de Estados Unidos e Israel; el enquistamiento de los espías dentro de sectores del Poder Judicial, y los históricos y difusos límites que delimitan los vínculos entre la SIDE/SI y las policías Federal y de la provincia de Buenos Aires.

Ya nadie habla
La denuncia del fiscal Nisman impacto de lleno en el centro de gravedad del Gobierno Nacional: La Presidenta de la Nación. Pero aún más pleno fue el golpe que sintió el gobierno con la muerte del fiscal. Desde ese momento, la denuncia pasó a un muy segundo plano hasta que el fiscal Gerardo Pollicita decidió darle curso a la investigación de los hechos denunciados por su colega fallecido, quien acusó a la Presidenta y al canciller Timerman.
De allí en adelante se produjo una notable reducción de la denuncia Nisman, denuncia desestimada por su falta de densidad jurídica por funcionarios del Gobierno y por juristas tan disímiles como León Arslanián, Luis Moreno Ocampo, Julio Maier y el ex juez de la Corte, Eugenio Zaffaroni.
Breve crónica de esa reducción:
- 300 páginas fueron el soporte de la denuncia del fiscal Nisman.
- 63 son las páginas que el juez Daniel Rafecas escribió para desestimar la denuncia de Nisman.
- 35 páginas escribió el fiscal Gerardo Pollicita para apelar el fallo de Rafecas.
Notoria reducción de una denuncia exagerada que terminó enfrentando a Nisman con el propio Nisman.

Folletín
Una vez  que la conmoción por la muerte del fiscal se fue difuminando, comenzó el folletín delictual en el discurso periodístico.  Los diarios, las radios y los canales de televisión se plagaron de mediocres émulos de Philip Marlowe que saturaron el relato informativo con una lengua forense desconocida para el gran público.
Lengua, en muchos casos, tan diligente como los datos y operaciones que se suceden a diario. Un cóctel imposible de aguantar por la alta concentración de especificaciones técnicas de la jerga criminalística. 
Y otra vez la denuncia que desaparece. Todo es ya discurso forense y judicial. Los legos, abrumados por tanto charlatán de feria.

El arroyo de Salgado
Y en eso llegó la jueza. Primero circunspecta, con grave seriedad en su rostro y en las exiguas declaraciones realizadas. Luego, ya constituida en querellante, altiva en su lenguaje letrado. La jueza, ex esposa de Nisman, que presentó a sus peritos de parte, quienes exhiben un no muy conocido prontuario: Ellos son el “prestigioso médico forense” Osvaldo Raffo y el “especialista en criminalística” Daniel Salcedo,  quienes peritaron sobre lo peritado y pusieron en cuestión el informe oficial del Ministerio Público
Detengámonos un poco en Raffo y Salcedo. Horacio Vertbisky publicó el domingo 15 de febrero en el diario Página 12, un perfil de estos reconocidos profesionales: Dice Vertbisky en “Gente con pericia”: “ Protegido del ex jefe de la Policía Bonaerense Pedro Klodczik, Salcedo fue Superintendente de Policía Científica y Jefe de Policía y uno de los negociadores del contrato con la empresa francesa Sagem Securité para digitalizar los antecedentes personales, mediante el software y el hardware Automated Fingerprints Identification System (AFIS). Al retirarse pasó al otro lado del mostrador como representante del IAFIS Group, distribuidor de Sagem en la Argentina. Salcedo está asociado en el grupo Kustos de seguridad con el vocal de la Asociación Empresaria (AEA) Teddy Karagozian. Además de los negocios, es un hombre de convicciones ideológicas. Como Superintendente de Policía Científica, entregó parte de la capacitación de sus técnicos en criminalística y seguridad a la Fraternidad de Agrupaciones Santo Tomás de Aquino (FASTA), una organización confesional conducida por Fray Aníbal Fosbery, que colaboró con el gobierno militar de 1976 a 1983 y que hoy objeta los juicios por los crímenes de entonces”
“En 1981, el oficial principal Osvaldo Raffo le escribió al general Ramón Camps que sintió “un problema de conciencia y de dignidad” cuando supo que Jacobo Timerman denunció haber sido torturado. Él revisó a Timerman en la jefatura de policía y “no presentaba signo alguno de violencia externa”. Su tremenda descripción de Timerman es la de un hombre “de actitud humilde y tímida”, quien “era tratado correctamente”. Sólo asustado a golpes, Timerman podía parecer humilde y tímido. El 19 de junio de 1984, ante el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, Raffo contó que además de revisarlo por orden del comisario Miguel Etchecolatz también asistió a un interrogatorio a Timerman. De inmediato advirtió el riesgo e intentó explicar que más que “un interrogatorio policial” le pareció “una plática entre personas, una conversación” sobre “política, cuestiones sociales y económicas” ( http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/subnotas/266178-71569-2015-02-15.html )
Gracias a la pericia de Raffo y Salcedo pasamos de “muerte dudosa”, inclinándose por el peso de los datos arrojados por la investigación de Fein y su equipo, hacia el suicidio, a “asesinato” por ausencia de espasmo cadavérico y por certeza de agonía. Raffo y Salcedo  afirmaron que se expresaron bajo juramento, pero ésta es una expresión que es usada por los médicos de la Policía de la Provincia de Buenos Aires y no puede ser equiparada a un juramento ante la Justicia.

La jueza y la conferencia
El día 5 de Marzo de 2015 la viuda de Nisman, la jueza Sandra Arroyo Salgado, dio una conferencia de prensa que se anunció como la presentación de los resultados del peritaje de la querella. En la conferencia, Arroyo Salgado afirmó que “la muerte de Nisman es un magnicidio que merece la respuesta de todas las instituciones de la República”. Y pidió “prudencia y ética profesional en el tratamiento del caso”. Prudencia y respeto que, es una impresión, la propia Arroyo Salgado no respeta cuando se opone firmemente a que se investiguen las llamadas telefónicas de los celulares del fiscal fallecido.
¿Arroyo Salgado habló como querellante o jueza, en la conferencia de prensa del 5 de Marzo pasado?
Entrevistado por Martín Granovsky para Página 12, el médico legista Juan Carlos Fenoglio (especialista consultor en medicina legal y anatomopatólogo) dijo que la exposición de la ex esposa de Alberto Nisman fue simplemente “un informe”. Afirmó que del texto hecho público por Arroyo Salgado no puede deducirse si se trató de un suicidio o un asesinato, y expresó que es importante avanzar en la pesquisa sobre las comunicaciones. (http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-267621-2015-03-08.html)

Aprovechamientos del caso
La Jueza Sandra Arroyo Salgado tiene por objetivo lograr que la causa, tipificada por sus peritos de parte como “asesinato”, pase al fuero federal. Arroyo Salgado comenzó su estrategia con las declaraciones que hizo en el aeropuerto, a su regreso al país el día después de la muerte de Nisman. Allí dijo que no creía que Nisman, por “sus características”, se hubiera suicidado. Lo reiteró en el Senado, el 18 de febrero, antes de la marcha de los silenciosos fiscales. En la conferencia de prensa del jueves dijo: “ha quedado acreditado con rigor científico lo que la familia ya había sostenido: Nisman no se suicidó”.
Un Dato importante: El 15 de junio de 2008 el diario Crítica de la Argentina publicó una nota de su propietario, Jorge Lanata, titulada La GESTAPO K en la que afirmaba que Arroyo fue designada jueza federal de San Isidro “de la mano de Stiuso y de su esposo”. Agregó que “todas las fuentes judiciales, policiales y del Gobierno consultadas coincidieron en un punto: el de San Isidro es un juzgado de la SIDE”. Ella vendría a ser así el cupo femenino de la Escudería Stiuso
Es decir, si Nisman no se suicidó y su asesinato constituye un magnicidio que afecta gravemente a las instituciones de la República, el caso es ya materia de la justicia federal, donde espera el juez Luis Osvaldo Rodríguez, quien – como sostiene Horacio Vertbisky - lleva una causa por amenazas contra Nisman, Arroyo Salgado y el ex director de Operaciones de la Secretaría de Inteligencia, Antonio Horacio Stiuso, previa a la muerte del fiscal.  Vertbisky documenta que Rodríguez “ya como juez federal, obstruyó la investigación sobre los sobornos y el tráfico de influencias en la causa por el asesinato de Mariano Ferreyra, que involucran al juez de la Cámara de Casación federal Eduardo Riggi, al prosecretario de ese tribunal Luis Ameghino Escobar, al ex juez federal Aristóbulo Aráoz de Lamadrid y al agente de la SIDE Juan José Riquelme”
La impugnación de lo investigado por la fiscal Fein, la afirmación del “asesinato” de Nisman, el dato arrojado por los peritos de parte con relación a la hora en que habría muerto Nisman, dan como principal sospechoso al informático Lagomarsino. Todo cierra: asesinato y sospechoso casi perfecto. Más las intenciones de obturar, con el pase al fuero federal, donde reside la “Escudería Stiuso”, el peritaje de las comunicaciones del fiscal fallecido. Al terminar esta nota, la jueza Fabiana Palmaghini , tras una solicitud de la querella, pidió a la Policía Metropolitana que allane el domicilio de Lagomarsino e incaute celulares, computadoras, vestimenta y hasta la play station de sus hijos. El allanamiento se realizó. Todo cierra.   
Por: Conrado Yasenza
Periodista. Director de la Revista La Tecl@ Eñe http://lateclaene.wix.com/la-tecla-ene
- See more at: http://www.lasubjetiva.com/politica-y-sociedad/espias-jueces-y-peritos#sthash.ULvcRhnA.dpuf
La SI y después
A más de cincuenta días  de la muerte del fiscal especial para la causa AMIA, Natalio Alberto Nisman, hay varios planos que se disputan la escena:
a) La investigación que lleva a cabo,  desde el inicio, la fiscal Viviana Fein, y que fue caratulada como “muerte dudosa”.
b) el descabezamiento de la SI (Secretaría de Inteligencia) en el que fueron relevados el agente Antonio Horacio Stiuso, alias Jaime Stiuso/Stiles, quien desde 1972 presta sus oficios al espionaje vernáculo, junto a sus “jefes” formales,  Héctor Icazuriaga y Francisco Larcher.
c) la discusión sobre los servicios de inteligencia: Para qué sirven, cuáles son sus funciones,  cómo operará la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), creación tardía pero necesaria – ya aprobada por ley - en remplazo de la SI. Tarea ardua esta ya que es sabido que las estructuras de espías no se crean en un mes ni en un año, y que los espías nunca dejan de serlo.
En este punto es preciso tener en cuenta, como ejes a discutir una vez creada la AFI, las relaciones de los espías locales con los servicios de inteligencia de Estados Unidos e Israel; el enquistamiento de los espías dentro de sectores del Poder Judicial, y los históricos y difusos límites que delimitan los vínculos entre la SIDE/SI y las policías Federal y de la provincia de Buenos Aires.

Ya nadie habla
La denuncia del fiscal Nisman impacto de lleno en el centro de gravedad del Gobierno Nacional: La Presidenta de la Nación. Pero aún más pleno fue el golpe que sintió el gobierno con la muerte del fiscal. Desde ese momento, la denuncia pasó a un muy segundo plano hasta que el fiscal Gerardo Pollicita decidió darle curso a la investigación de los hechos denunciados por su colega fallecido, quien acusó a la Presidenta y al canciller Timerman.
De allí en adelante se produjo una notable reducción de la denuncia Nisman, denuncia desestimada por su falta de densidad jurídica por funcionarios del Gobierno y por juristas tan disímiles como León Arslanián, Luis Moreno Ocampo, Julio Maier y el ex juez de la Corte, Eugenio Zaffaroni.
Breve crónica de esa reducción:
- 300 páginas fueron el soporte de la denuncia del fiscal Nisman.
- 63 son las páginas que el juez Daniel Rafecas escribió para desestimar la denuncia de Nisman.
- 35 páginas escribió el fiscal Gerardo Pollicita para apelar el fallo de Rafecas.
Notoria reducción de una denuncia exagerada que terminó enfrentando a Nisman con el propio Nisman.

Folletín
Una vez  que la conmoción por la muerte del fiscal se fue difuminando, comenzó el folletín delictual en el discurso periodístico.  Los diarios, las radios y los canales de televisión se plagaron de mediocres émulos de Philip Marlowe que saturaron el relato informativo con una lengua forense desconocida para el gran público.
Lengua, en muchos casos, tan diligente como los datos y operaciones que se suceden a diario. Un cóctel imposible de aguantar por la alta concentración de especificaciones técnicas de la jerga criminalística. 
Y otra vez la denuncia que desaparece. Todo es ya discurso forense y judicial. Los legos, abrumados por tanto charlatán de feria.

El arroyo de Salgado
Y en eso llegó la jueza. Primero circunspecta, con grave seriedad en su rostro y en las exiguas declaraciones realizadas. Luego, ya constituida en querellante, altiva en su lenguaje letrado. La jueza, ex esposa de Nisman, que presentó a sus peritos de parte, quienes exhiben un no muy conocido prontuario: Ellos son el “prestigioso médico forense” Osvaldo Raffo y el “especialista en criminalística” Daniel Salcedo,  quienes peritaron sobre lo peritado y pusieron en cuestión el informe oficial del Ministerio Público
Detengámonos un poco en Raffo y Salcedo. Horacio Vertbisky publicó el domingo 15 de febrero en el diario Página 12, un perfil de estos reconocidos profesionales: Dice Vertbisky en “Gente con pericia”: “ Protegido del ex jefe de la Policía Bonaerense Pedro Klodczik, Salcedo fue Superintendente de Policía Científica y Jefe de Policía y uno de los negociadores del contrato con la empresa francesa Sagem Securité para digitalizar los antecedentes personales, mediante el software y el hardware Automated Fingerprints Identification System (AFIS). Al retirarse pasó al otro lado del mostrador como representante del IAFIS Group, distribuidor de Sagem en la Argentina. Salcedo está asociado en el grupo Kustos de seguridad con el vocal de la Asociación Empresaria (AEA) Teddy Karagozian. Además de los negocios, es un hombre de convicciones ideológicas. Como Superintendente de Policía Científica, entregó parte de la capacitación de sus técnicos en criminalística y seguridad a la Fraternidad de Agrupaciones Santo Tomás de Aquino (FASTA), una organización confesional conducida por Fray Aníbal Fosbery, que colaboró con el gobierno militar de 1976 a 1983 y que hoy objeta los juicios por los crímenes de entonces”
“En 1981, el oficial principal Osvaldo Raffo le escribió al general Ramón Camps que sintió “un problema de conciencia y de dignidad” cuando supo que Jacobo Timerman denunció haber sido torturado. Él revisó a Timerman en la jefatura de policía y “no presentaba signo alguno de violencia externa”. Su tremenda descripción de Timerman es la de un hombre “de actitud humilde y tímida”, quien “era tratado correctamente”. Sólo asustado a golpes, Timerman podía parecer humilde y tímido. El 19 de junio de 1984, ante el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, Raffo contó que además de revisarlo por orden del comisario Miguel Etchecolatz también asistió a un interrogatorio a Timerman. De inmediato advirtió el riesgo e intentó explicar que más que “un interrogatorio policial” le pareció “una plática entre personas, una conversación” sobre “política, cuestiones sociales y económicas” ( http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/subnotas/266178-71569-2015-02-15.html )
Gracias a la pericia de Raffo y Salcedo pasamos de “muerte dudosa”, inclinándose por el peso de los datos arrojados por la investigación de Fein y su equipo, hacia el suicidio, a “asesinato” por ausencia de espasmo cadavérico y por certeza de agonía. Raffo y Salcedo  afirmaron que se expresaron bajo juramento, pero ésta es una expresión que es usada por los médicos de la Policía de la Provincia de Buenos Aires y no puede ser equiparada a un juramento ante la Justicia.

La jueza y la conferencia
El día 5 de Marzo de 2015 la viuda de Nisman, la jueza Sandra Arroyo Salgado, dio una conferencia de prensa que se anunció como la presentación de los resultados del peritaje de la querella. En la conferencia, Arroyo Salgado afirmó que “la muerte de Nisman es un magnicidio que merece la respuesta de todas las instituciones de la República”. Y pidió “prudencia y ética profesional en el tratamiento del caso”. Prudencia y respeto que, es una impresión, la propia Arroyo Salgado no respeta cuando se opone firmemente a que se investiguen las llamadas telefónicas de los celulares del fiscal fallecido.
¿Arroyo Salgado habló como querellante o jueza, en la conferencia de prensa del 5 de Marzo pasado?
Entrevistado por Martín Granovsky para Página 12, el médico legista Juan Carlos Fenoglio (especialista consultor en medicina legal y anatomopatólogo) dijo que la exposición de la ex esposa de Alberto Nisman fue simplemente “un informe”. Afirmó que del texto hecho público por Arroyo Salgado no puede deducirse si se trató de un suicidio o un asesinato, y expresó que es importante avanzar en la pesquisa sobre las comunicaciones. (http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-267621-2015-03-08.html)

Aprovechamientos del caso
La Jueza Sandra Arroyo Salgado tiene por objetivo lograr que la causa, tipificada por sus peritos de parte como “asesinato”, pase al fuero federal. Arroyo Salgado comenzó su estrategia con las declaraciones que hizo en el aeropuerto, a su regreso al país el día después de la muerte de Nisman. Allí dijo que no creía que Nisman, por “sus características”, se hubiera suicidado. Lo reiteró en el Senado, el 18 de febrero, antes de la marcha de los silenciosos fiscales. En la conferencia de prensa del jueves dijo: “ha quedado acreditado con rigor científico lo que la familia ya había sostenido: Nisman no se suicidó”.
Un Dato importante: El 15 de junio de 2008 el diario Crítica de la Argentina publicó una nota de su propietario, Jorge Lanata, titulada La GESTAPO K en la que afirmaba que Arroyo fue designada jueza federal de San Isidro “de la mano de Stiuso y de su esposo”. Agregó que “todas las fuentes judiciales, policiales y del Gobierno consultadas coincidieron en un punto: el de San Isidro es un juzgado de la SIDE”. Ella vendría a ser así el cupo femenino de la Escudería Stiuso
Es decir, si Nisman no se suicidó y su asesinato constituye un magnicidio que afecta gravemente a las instituciones de la República, el caso es ya materia de la justicia federal, donde espera el juez Luis Osvaldo Rodríguez, quien – como sostiene Horacio Vertbisky - lleva una causa por amenazas contra Nisman, Arroyo Salgado y el ex director de Operaciones de la Secretaría de Inteligencia, Antonio Horacio Stiuso, previa a la muerte del fiscal.  Vertbisky documenta que Rodríguez “ya como juez federal, obstruyó la investigación sobre los sobornos y el tráfico de influencias en la causa por el asesinato de Mariano Ferreyra, que involucran al juez de la Cámara de Casación federal Eduardo Riggi, al prosecretario de ese tribunal Luis Ameghino Escobar, al ex juez federal Aristóbulo Aráoz de Lamadrid y al agente de la SIDE Juan José Riquelme”
La impugnación de lo investigado por la fiscal Fein, la afirmación del “asesinato” de Nisman, el dato arrojado por los peritos de parte con relación a la hora en que habría muerto Nisman, dan como principal sospechoso al informático Lagomarsino. Todo cierra: asesinato y sospechoso casi perfecto. Más las intenciones de obturar, con el pase al fuero federal, donde reside la “Escudería Stiuso”, el peritaje de las comunicaciones del fiscal fallecido. Al terminar esta nota, la jueza Fabiana Palmaghini , tras una solicitud de la querella, pidió a la Policía Metropolitana que allane el domicilio de Lagomarsino e incaute celulares, computadoras, vestimenta y hasta la play station de sus hijos. El allanamiento se realizó. Todo cierra.   
Por: Conrado Yasenza
Periodista. Director de la Revista La Tecl@ Eñe http://lateclaene.wix.com/la-tecla-ene
- See more at: http://www.lasubjetiva.com/politica-y-sociedad/espias-jueces-y-peritos#sthash.ULvcRhnA.dpuf

La SI y después

A más de cincuenta días  de la muerte del fiscal especial para la causa AMIA, Natalio Alberto Nisman, hay varios planos que se disputan la escena:

a) La investigación que lleva a cabo,  desde el inicio, la fiscal Viviana Fein, y que fue caratulada como “muerte dudosa”.

b) el descabezamiento de la SI (Secretaría de Inteligencia) en el que fueron relevados el agente Antonio Horacio Stiuso, alias Jaime Stiuso/Stiles, quien desde 1972 presta sus oficios al espionaje vernáculo, junto a sus “jefes” formales,  Héctor Icazuriaga y Francisco Larcher.

c) la discusión sobre los servicios de inteligencia: Para qué sirven, cuáles son sus funciones,  cómo operará la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), creación tardía pero necesaria – ya aprobada por ley - en remplazo de la SI. Tarea ardua esta ya que es sabido que las estructuras de espías no se crean en un mes ni en un año, y que los espías nunca dejan de serlo.

En este punto es preciso tener en cuenta, como ejes a discutir una vez creada la AFI, las relaciones de los espías locales con los servicios de inteligencia de Estados Unidos e Israel; el enquistamiento de los espías dentro de sectores del Poder Judicial, y los históricos y difusos límites que delimitan los vínculos entre la SIDE/SI y las policías Federal y de la provincia de Buenos Aires.



Ya nadie habla

La denuncia del fiscal Nisman impacto de lleno en el centro de gravedad del Gobierno Nacional: La Presidenta de la Nación. Pero aún más pleno fue el golpe que sintió el gobierno con la muerte del fiscal. Desde ese momento, la denuncia pasó a un muy segundo plano hasta que el fiscal Gerardo Pollicita decidió darle curso a la investigación de los hechos denunciados por su colega fallecido, quien acusó a la Presidenta y al canciller Timerman.

De allí en adelante se produjo una notable reducción de la denuncia Nisman, denuncia desestimada por su falta de densidad jurídica por funcionarios del Gobierno y por juristas tan disímiles como León Arslanián, Luis Moreno Ocampo, Julio Maier y el ex juez de la Corte, Eugenio Zaffaroni.

Breve crónica de esa reducción:

- 300 páginas fueron el soporte de la denuncia del fiscal Nisman.

- 63 son las páginas que el juez Daniel Rafecas escribió para desestimar la denuncia de Nisman.

- 35 páginas escribió el fiscal Gerardo Pollicita para apelar el fallo de Rafecas.

Notoria reducción de una denuncia exagerada que terminó enfrentando a Nisman con el propio Nisman.



Folletín

Una vez  que la conmoción por la muerte del fiscal se fue difuminando, comenzó el folletín delictual en el discurso periodístico.  Los diarios, las radios y los canales de televisión se plagaron de mediocres émulos de Philip Marlowe que saturaron el relato informativo con una lengua forense desconocida para el gran público.

Lengua, en muchos casos, tan diligente como los datos y operaciones que se suceden a diario. Un cóctel imposible de aguantar por la alta concentración de especificaciones técnicas de la jerga criminalística.

Y otra vez la denuncia que desaparece. Todo es ya discurso forense y judicial. Los legos, abrumados por tanto charlatán de feria.



El arroyo de Salgado

Y en eso llegó la jueza. Primero circunspecta, con grave seriedad en su rostro y en las exiguas declaraciones realizadas. Luego, ya constituida en querellante, altiva en su lenguaje letrado. La jueza, ex esposa de Nisman, que presentó a sus peritos de parte, quienes exhiben un no muy conocido prontuario: Ellos son el “prestigioso médico forense” Osvaldo Raffo y el “especialista en criminalística” Daniel Salcedo,  quienes peritaron sobre lo peritado y pusieron en cuestión el informe oficial del Ministerio Público

Detengámonos un poco en Raffo y Salcedo. Horacio Vertbisky publicó el domingo 15 de febrero en el diario Página 12, un perfil de estos reconocidos profesionales: Dice Vertbisky en “Gente con pericia”: “ Protegido del ex jefe de la Policía Bonaerense Pedro Klodczik, Salcedo fue Superintendente de Policía Científica y Jefe de Policía y uno de los negociadores del contrato con la empresa francesa Sagem Securité para digitalizar los antecedentes personales, mediante el software y el hardware Automated Fingerprints Identification System (AFIS). Al retirarse pasó al otro lado del mostrador como representante del IAFIS Group, distribuidor de Sagem en la Argentina. Salcedo está asociado en el grupo Kustos de seguridad con el vocal de la Asociación Empresaria (AEA) Teddy Karagozian. Además de los negocios, es un hombre de convicciones ideológicas. Como Superintendente de Policía Científica, entregó parte de la capacitación de sus técnicos en criminalística y seguridad a la Fraternidad de Agrupaciones Santo Tomás de Aquino (FASTA), una organización confesional conducida por Fray Aníbal Fosbery, que colaboró con el gobierno militar de 1976 a 1983 y que hoy objeta los juicios por los crímenes de entonces”

“En 1981, el oficial principal Osvaldo Raffo le escribió al general Ramón Camps que sintió “un problema de conciencia y de dignidad” cuando supo que Jacobo Timerman denunció haber sido torturado. Él revisó a Timerman en la jefatura de policía y “no presentaba signo alguno de violencia externa”. Su tremenda descripción de Timerman es la de un hombre “de actitud humilde y tímida”, quien “era tratado correctamente”. Sólo asustado a golpes, Timerman podía parecer humilde y tímido. El 19 de junio de 1984, ante el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, Raffo contó que además de revisarlo por orden del comisario Miguel Etchecolatz también asistió a un interrogatorio a Timerman. De inmediato advirtió el riesgo e intentó explicar que más que “un interrogatorio policial” le pareció “una plática entre personas, una conversación” sobre “política, cuestiones sociales y económicas” ( http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/subnotas/266178-71569-2015-02-15.html )

Gracias a la pericia de Raffo y Salcedo pasamos de “muerte dudosa”, inclinándose por el peso de los datos arrojados por la investigación de Fein y su equipo, hacia el suicidio, a “asesinato” por ausencia de espasmo cadavérico y por certeza de agonía. Raffo y Salcedo  afirmaron que se expresaron bajo juramento, pero ésta es una expresión que es usada por los médicos de la Policía de la Provincia de Buenos Aires y no puede ser equiparada a un juramento ante la Justicia.



La jueza y la conferencia

El día 5 de Marzo de 2015 la viuda de Nisman, la jueza Sandra Arroyo Salgado, dio una conferencia de prensa que se anunció como la presentación de los resultados del peritaje de la querella. En la conferencia, Arroyo Salgado afirmó que “la muerte de Nisman es un magnicidio que merece la respuesta de todas las instituciones de la República”. Y pidió “prudencia y ética profesional en el tratamiento del caso”. Prudencia y respeto que, es una impresión, la propia Arroyo Salgado no respeta cuando se opone firmemente a que se investiguen las llamadas telefónicas de los celulares del fiscal fallecido.

¿Arroyo Salgado habló como querellante o jueza, en la conferencia de prensa del 5 de Marzo pasado?

Entrevistado por Martín Granovsky para Página 12, el médico legista Juan Carlos Fenoglio (especialista consultor en medicina legal y anatomopatólogo) dijo que la exposición de la ex esposa de Alberto Nisman fue simplemente “un informe”. Afirmó que del texto hecho público por Arroyo Salgado no puede deducirse si se trató de un suicidio o un asesinato, y expresó que es importante avanzar en la pesquisa sobre las comunicaciones. (http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-267621-2015-03-08.html)



Aprovechamientos del caso

La Jueza Sandra Arroyo Salgado tiene por objetivo lograr que la causa, tipificada por sus peritos de parte como “asesinato”, pase al fuero federal. Arroyo Salgado comenzó su estrategia con las declaraciones que hizo en el aeropuerto, a su regreso al país el día después de la muerte de Nisman. Allí dijo que no creía que Nisman, por “sus características”, se hubiera suicidado. Lo reiteró en el Senado, el 18 de febrero, antes de la marcha de los silenciosos fiscales. En la conferencia de prensa del jueves dijo: “ha quedado acreditado con rigor científico lo que la familia ya había sostenido: Nisman no se suicidó”.

Un Dato importante: El 15 de junio de 2008 el diario Crítica de la Argentina publicó una nota de su propietario, Jorge Lanata, titulada La GESTAPO K en la que afirmaba que Arroyo fue designada jueza federal de San Isidro “de la mano de Stiuso y de su esposo”. Agregó que “todas las fuentes judiciales, policiales y del Gobierno consultadas coincidieron en un punto: el de San Isidro es un juzgado de la SIDE”. Ella vendría a ser así el cupo femenino de la Escudería Stiuso

Es decir, si Nisman no se suicidó y su asesinato constituye un magnicidio que afecta gravemente a las instituciones de la República, el caso es ya materia de la justicia federal, donde espera el juez Luis Osvaldo Rodríguez, quien – como sostiene Horacio Vertbisky - lleva una causa por amenazas contra Nisman, Arroyo Salgado y el ex director de Operaciones de la Secretaría de Inteligencia, Antonio Horacio Stiuso, previa a la muerte del fiscal.  Vertbisky documenta que Rodríguez “ya como juez federal, obstruyó la investigación sobre los sobornos y el tráfico de influencias en la causa por el asesinato de Mariano Ferreyra, que involucran al juez de la Cámara de Casación federal Eduardo Riggi, al prosecretario de ese tribunal Luis Ameghino Escobar, al ex juez federal Aristóbulo Aráoz de Lamadrid y al agente de la SIDE Juan José Riquelme”

La impugnación de lo investigado por la fiscal Fein, la afirmación del “asesinato” de Nisman, el dato arrojado por los peritos de parte con relación a la hora en que habría muerto Nisman, dan como principal sospechoso al informático Lagomarsino. Todo cierra: asesinato y sospechoso casi perfecto. Más las intenciones de obturar, con el pase al fuero federal, donde reside la “Escudería Stiuso”, el peritaje de las comunicaciones del fiscal fallecido. Al terminar esta nota, la jueza Fabiana Palmaghini , tras una solicitud de la querella, pidió a la Policía Metropolitana que allane el domicilio de Lagomarsino e incaute celulares, computadoras, vestimenta y hasta la play station de sus hijos. El allanamiento se realizó. Todo cierra.  

Por: Conrado Yasenza
Periodista. Director de la Revista La Tecl@ Eñe http://lateclaene.wix.com/la-tecla-ene

Publicado en:
http://www.lasubjetiva.com/politica-y-sociedad/espias-jueces-y-peritos

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