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domingo, 19 de mayo de 2013

STURZENEGGER: CUANDO LA REACCIÓN SUPERA LA FICCIÓN, por Federico Bernal (para “INFOnews” del 15-05-13)




Economista predilecto del neoliberalismo, lidera la renacida banda de los Chicago - Di Tella Boys.





"En economía no hay nada misterioso ni inaccesible al entendimiento del hombre de la calle. Si hay un misterio, reside él en el oculto propósito que puede perseguir el economista y que no es otro que la disimulación del interés concreto a que se sirve". Arturo Jauretche.
El Plan Prebisch: retorno al coloniaje.



El currículum de Federico Sturzenegger figura en el portal oficial de la Universidad Di Tella, de la que fue decano. Del choclo escrito íntegramente en inglés, destacamos: "... es consultado regularmente por corporaciones y organismos internacionales (sic)." Sturzenegger, economista predilecto del neoliberalismo criollo, las corporaciones y los organismos internacionales lidera hoy la renacida banda de los Chicago - Di Tella Boys. Alumno estrella de Rudiger Dornbusch –célebre por haber propuesto en 2002 que la Argentina ceda el manejo de su economía y finanzas a un equipo de técnicos extranjeros– compartió pluma con su maestro en sendos artículos y libros, despidiéndolo en emotivo homenaje junto a otros colegas de la Di Tella en el año de su deceso. Previamente a convertirse en funcionario de López Murphy y Domingo Cavallo durante 2001, Sturzenegger brindó servicios de consultoría al FMI en 1993 y 1994 (retomaría en 2003, 2004 y 2005), al Banco Mundial en 1988, 1994 y 1999 (luego en 2002 y 2005) y al BID en 2001 (repetiría en 2003, 2005 y 2007). De su CV se infiere que estuvo desempleado en el 2000 pues no figura ninguna consultoría. Quizás esto explique su columna de opinión en La Nación del 1 de octubre de 2000: "Hay que privatizar el Banco Nación." Inteligente, se hacía camino al andar. A continuación una breve sinopsis biográfica de uno de los ideólogos y ejecutores de la peor crisis económica y social argentina, crisis que no fue producto del error humano –ni el suyo ni el de sus camaradas– sino del éxito de los inhumanos operadores de mercado, justamente como el Fede que acá pasamos a relatar.
ADMINISTRANDO PARA LOS MERCADOS. Sturzenegger renunció exactamente un mes antes de la pueblada del 19 y 20 de diciembre, la única movilización registrada en la Argentina del 2001 a esta parte verdaderamente espontánea (no convocada por "redes sociales") y popular (en el sentido de ir contra el libre-mercado). Tuvo a su cargo la política económica durante prácticamente todo el 2001. ¿Qué sucedía entonces? Los indicadores socioeconómicos no detenían su exponencial deterioro: aumento del desempleo (16,4%), caída del PBI y de reservas internacionales, aumento de las tasas de interés real que aceleraban la ya asfixiada actividad económica. La pobreza y la indigencia saltaban del 28,9% y el 7,7% al 35,2% y 12,2% entre octubre de 2000 y octubre de 2001, respectivamente (unos 13 millones de pobres e indigentes).
En diciembre de 2000, el FMI, Banco Mundial y BID nos blindaron por 40 mil millones de dólares apuntando a preservar la Convertibilidad amenazada de default hasta tanto no concluyera la negociación del canje de títulos de la deuda externa. Dicha negociación terminó en mayo de 2001, con la reestructuración de la deuda en bonos. ¿Resultado del megacanje? La situación financiera y económica del Estado empeoró; el riesgo de default también. Las metas comprometidas con el FMI no podían cumplirse. Se requería de un nuevo acuerdo con el organismo, acuerdo anunciado con bombos y platillos el 21 de agosto en Washington. Hacia allí viajó Sturzenegger y equipo (la política económica se definía en Washington). Las condiciones del FMI eran inéditamente leoninas: los salarios estatales superiores a 1000 pesos y las jubilaciones superiores a 500 pesos (la línea de pobreza era de 450 pesos), así como las transferencias del Estado Nacional a las provincias debían reducirse un 13%. Era el "déficit cero", que obviamente, se cumplió. A su regreso del viaje, la Universidad Di Tella realizó una mesa de debate con los subordinados. El secretario de Política Económica "defendió la política instrumentada por Cavallo y repitió hasta el cansancio que el equipo económico tiene como premisa fundamental respetar los derechos de propiedad (La Nación 24/8/01).
Entre septiembre y diciembre de 2001 el PBI cayó 10,5%, la recaudación de impuestos nacionales y de seguridad social un 30% interanualmente y las reservas del BCRA en cerca de un 40% (enero a agosto). El FMI realizó un segundo desembolso extraordinario de 6300 millones. Curiosamente, entre septiembre y diciembre de 2001 salieron del sistema (para ponerse a salvo de la inevitable devaluación que sólo banqueros y especuladores conocían iría a suceder) algo más de 6000 millones. ¡Qué casualidad! El caos era absoluto, pero Sturzenegger, perspicaz, renunció a tiempo. El 20 de noviembre de 2001 el ministro Cavallo anunció en conferencia de prensa: "Federico me comunicó que quería volver al mundo académico y yo acepté esa decisión". Aclaración pertinente: entiéndase por "académico" ser consultor del Banco Mundial (2002) y dedicarse a escribir las guías para la dolarización de la Argentina, resumidas en su libro Dollarization (analizado próximamente). El proyecto de presupuesto para el 2002 presentado al Congreso por el inefable ministro el 18 de diciembre, proponía un ajuste adicional de 6000 millones de dólares, con aumento del recorte salarial y las jubilaciones, eliminación parcial o total del aguinaldo de los estatales y poda a las partidas de las universidades. Sturzenegger ya no estaba al frente sino Guillermo Mondino, su reemplazante, que como había afirmado Cavallo semanas atrás, significó "una continuidad total, ya que en la práctica Federico y Guillermo venían trabajando en equipo". Los brutales ajustes al pueblo argentino previstos para 2002 por Sturzenegger, Mondino y Cavallo intentaban responder las exigencias del FMI para destrabar el desembolso pendiente de 1260 millones de dólares y así salvar a especuladores y banqueros.
"HACE FALTA LIDERAZGO Y COMPROMISO CON LA ECONOMÍA DE MERCADO". El subtítulo de arriba es en realidad el título del artículo escrito por Sturzenegger en 2002 y publicado por El Cronista el 30/12/02. ¡Patriota! Dos días después de escrita la convocatoria comenzaría el año dorado para este consultor: asesoría al FMI, al BID y al Banco de Inglaterra. ¡Tres veces patriota! Ahora vayamos al artículo. Así arranca: "Durante los años '90 Argentina adoptó un modelo de crecimiento muy exitoso que en pocos años cambió la fisonomía de nuestro país". Luego nos explica los pilares de la década del '90, esto es, revolución productiva y salariazo: "El proyecto de crecimiento de los '90 estaba basado en salarios altos ... y una fuerte demanda doméstica sostenida por abundante entrada de capitales. (...) Es así como la economía se recupera un 58% entre 1990 y 1998." Esta definición lo describe a él y formateados cerebros del estilo de cuerpo entero. Entre 1880 y 1930, reza la biblia de la Argentina granja, nuestro PBI creció y se expandió de tal forma que posicionó al país a la vanguardia mundial. Claro que con un pequeño detalle: internamente esta riqueza sería apropiada sólo por una minúscula élite.
Falta escribir el tercer tomo del libro de Bialet Massé El Estado de la clase obrera en la Argentina, para saber qué pasó con las clases populares y trabajadoras a lo largo y ancho del país en los noventa. Sigamos con la nota y veamos cómo fue que se derrumbó el socialismo de mercado de fines del siglo XX. En 1998 "...empiezan una serie de shocks que eventualmente llevaron a la caída de la Convertibilidad. Es que [ella] sólo funcionaba si había confianza impoluta en la continuidad del sistema". Luego describe los shocks: default ruso, devaluación de Brasil y renuncia de Chacho, shocks que derivaron en "una caída en los niveles de confianza que impulsaron una salida de capitales que hizo a la larga insostenible el régimen de Convertibilidad". En pocas palabras, la Argentina como timba y commodity. "La salida de capitales implicaba una contracción de la economía, que requería de crecientes ajustes fiscales, que cuando se hizo evidente que no vendrían puso en riesgo la solvencia del Estado y eventualmente generó la corrida bancaria que desembocó en el corralito y arrasó la Convertibilidad". Desafiamos al lector a que encuentre en este planteo al ser humano. Sturzenegger fue y sigue siendo uno de los muchos operadores de un aceitado modelo de saqueo, modelo para el cual el endeudamiento no es un problema sino una herramienta más de expoliación.
STURZENEGGER, PROCESAMIENTO, DESEMPLEO Y POBREZA. En fin, el actual presidente del Banco Ciudad, hombre PRO, fue educado e instruido para servir a intereses contrarios a una nación moderna, autosuficiente, soberana y socialmente justa. Asumió la función pública el 12 de marzo de 2001, convocado por López Murphy (LM) para poner en marcha su salvaje plan de ajuste al pueblo argentino. Ahora que se reabrió la causa por el corralito (¡que sólo demanda banqueros pero no ex funcionarios!), ¿qué pasará con los pedidos de procesamiento que el fiscal Federico Delgado hizo en 2009 por el delito de negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función pública vinculado al megacanje, pidiendo el procesamiento de varios ex funcionarios del ministerio de Economía de De la Rúa, entre ellos, el protagonista de esta reaccionaria ficción? ¿Qué justo juez o fiscal se animará a procesarlo por haber provocado un desempleo (incluye subocupación) del 40% en 2001, y por haber llevado la pobreza de 13 millones a 19 millones de compatriotas (a inicios de 2002)?
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