A VICTORIA MONTENEGRO, HORACIO PIETRAGALLA, A LOS NIETOS RECUPERADOS Y A LOS QUE VAMOS A RECUPERAR
“Algo habrán hecho”
Asquerosa y siniestra frase que ha servido para justificar las más horrendas atrocidades cometidas por la dictadura genocida cívica, militar y mediática que padecimos los argentinos desde el 24 de Marzo de 1976.
Muchos sentimos esa derrota como un desgarramiento en el corazón. Una grieta en el alma que jamás pensamos podría ser reparada.
Ayer, 5 de mayo de este maravilloso 2012, participé junto a un grupo de compañeras y compañeros de una jornada organizada por KOLINA8, la agrupación Kolina de Villa Lugano, en un local cedido por el Partido Humanista de Villa Riachuelo, en la calle Guamini 5238.
El nombre del evento: “JORNADA DE COMUNICACIÓN POPULAR: INTERNET Y LA BATALLA CULTURAL”
En otra columna haré la crónica del evento.
Esta tiene que ver con una movilización de sentimientos, producidos cuando mi mujer le propone a Victoria, hacerle llegar unos poemas míos escritos en aquella nefasta época y que agrupé bajo el título:
“GENERACION HUNDIDA…POSDATA…ALGO HABRAN HECHO”
Poemas que nunca publiqué por cierto pudor, culpa, o ese extraño sentimiento que nos invadió a quienes fuimos sobrevivientes, y que no hallo palabras para definir.
Pero esa frase, quedó repicando en las paredes de mi alma y de mi corazón.
“Algo habrán hecho”
Claro, que algo hicieron. Le quitaron tiempo a otro tipo de esparcimiento y se dedicaron a trabajar por el otro. No por un otro abstracto e indefinible. No.
Por eso otro que tenían al lado. En el barrio. En la fábrica. En la escuela. En la universidad. Pusieron en marcha un mecanismo que se llama SOLIDARIDAD.
“Algo habrán hecho”
Le pusieron el cuerpo a las necesidades, propias y ajenas. Por aquello de que “donde hay una necesidad nace un derecho”. Porque tenían muy claro que otra sociedad es posible. Y también que otro mundo es posible. Por qué no.
En ese camino se pusieron a trabajar. Con alegría. Con esperanza. Con el pecho lleno de sueños. Con la secreta ilusión de que cambiando ese presente, construían un mejor futuro para sus hijos.
“Algo habrán hecho”
Claro que hicieron algo. Sembraron la semilla que hoy hace posible que sus hijos, hoy, puedan ver la realidad de aquel futuro que soñamos, y que hoy estamos construyendo. Con otros sobrevivientes. Que llegaron por el voto del pueblo a gobernar este bendito país y comenzar a poner las cosas en su lugar.
“Algo habrán hecho”
Vaya si hicieron algo. Parieron a sus Madres y a sus Abuelas, para que nos marquen el rumbo. Con la dignidad, la templanza y la terquedad que ellos mismo tuvieron para llevar sus convicciones hasta las últimas circunstancias.
Nos dejaron sus banderas. Para que las tomemos y las llevemos a la victoria.
“Algo habrán hecho”
Hicieron posible, que el paso del tiempo sirviera para que la sociedad toda, o al menos, la mayoría que importa, tomaran conciencia de cual fue su lucha. El por qué de su compromiso. El rumbo de sus pasos.
Que no era otro que liberar a esta bendita Patria de la dependencia y llevarla camino a la LIBERACION.
“Algo habrán hecho”
Claro que sí. Nos señalaron el camino y hacia allá vamos caminando. Sin prisa, pero sin pausa. Con la velocidad que nuestra conciencia permite.
Gracias, mis queridos hermanos, hoy podemos decirles que vamos con sus banderas, construyendo los sueños que tuvimos, y que sus hijos están con nosotros andando el mismo camino.
Daniel Mojica
www.Facebook/leopoldomarechalII
Columnista de Radio Gráfica
Publicado en :
http://cuestioncultural.blogspot.com.ar/2012/05/los-hijos-de-mis-hermanos.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario