El triunfo de Humala consolida el eje de integración sudamericana
El presidente electo, identificado con los gobiernos hostiles al neoliberalismo, configura un nuevo escenario para profundizar la unidad comercial y la arquitectura financiera. Los ejes del plan que considerará el Consejo de Ministros.
La respuesta del establishment frente al triunfo de Ollanta Humala se expresó en el derrumbe de más de 12 puntos en la Bolsa, ocurrida el lunes siguiente al ballottage. Si bien ese marco catastrófico fue rápidamente desmentido por la recuperación de los días subsiguientes, la Bolsa fue el terreno donde los sectores concentrados expresaron su repudio y buscaron condicionar el rumbo del gobierno. Ollanta Humala logró derrotar, ajustadamente, a Keiko Fujimori, hija del emblema neoliberal peruano de los ’90 y fiel representante de aquellos intereses. Más allá de la incertidumbre sobre el impacto en su política interna frente a las presiones y el lobby que pudiera sufrir, Humala se identifica con los presidentes que configuran un bloque nacionalista, popular y socialdemócrata. Su triunfo, entonces, produce un desbalance de fuerzas en la geopolítica sudamericana, que aísla los gobiernos orientados a un desarrollo a partir del establecimiento de relaciones bilaterales con los Estados Unidos y los organismos financieros internacionales. Así, el verdadero triunfador en la segunda vuelta peruana podría haber sido el bloque compuesto por Brasil, Venezuela, la Argentina, Ecuador, Paraguay y Uruguay, lo que podría colaborar en la integración regional. Para dar una señal inequívoca de las prioridades del próximo gobierno, el futuro mandatario anunció una gira de reuniones con los presidentes de los países miembros del Mercosur, que ya comenzó el jueves en Brasil, y que llegará a nuestro país el martes 14. HERENCIA MALDITA. El país andino es una de las economías de la región que, en el marco de la crisis financiera internacional, han experimentado un crecimiento récord propio de las naciones “emergentes”. En este caso, sin embargo, ha sido sobre la base de un modelo neoliberal que usufructuó el boom en los precios de los metales preciosos (siempre beneficiados en época de crisis) pero sin desenvolver una política de desarrollo del mercado interno ni de integración regional.Su crecimiento, que a nivel de las exportaciones fue de un 32,3% entre 2009 y 2010 (muy por encima del 20% mundial), debido a la ausencia del Estado, no se tradujo en una mejora del empleo registrado (apenas el 20% de la población) ni de la distribución de la riqueza. Consultado por Tiempo Argentino sobre el escenario abierto por la elección peruana, Roberto Feletti, viceministro de economía y presidente del Grupo de Trabajo de Integración Financiera de la UNASUR (GTIF), se mostró optimista y cauto: “Tengo simpatías por lo que escuché de la plataforma de Humala durante la campaña, pero hay que esperar a ver cómo avanza en su gestión.” De todas formas, aseguró que “la lección que queda del comicio es que el crecimiento económico por sí mismo no genera inclusión social. Por eso es tan importante el modelo argentino, que ata de manera indisoluble crecimiento e inclusión.”Humala prometió financiar un plan social con el modelo de la Asignación Universal por Hijo de Argentina y el plan Bolsa Familia del Brasil elevando la alícuota del impuesto a la minería para su financiamiento. GANA UNASUR. El viernes pasado, de no ser por el impacto de las cenizas volcánicas que impidieron su llegada, se iba a reunir el Consejo de ministros de economía y presidentes de los bancos centrales de los doce países miembros de Unasur para formalizar en resoluciones concretas los lineamientos en los que viene trabajando desde el año 2007. Según fuentes del Palacio de Hacienda el cónclave se reprogramará para los próximos días. El inesperado desplante de la naturaleza no malogró la reunión técnica del GTIF que el jueves aprobó el Plan de Acción para la consideración del Conseo que propone los ejes para trascender, a nivel económico, los acuerdos políticos ya alcanzados.Las recomendaciones incluyen propuestas para “la expansión de un sistema multilateral de pagos asentado en el uso de las monedas locales; la coordinación de fondos financieros disponibles en plazos y tasas de interés mejores que las disponibles a fin de aplicarlos a proyectos de desarrollo e integración; la implementación de un mecanismo regional de coordinación de reservas que podría ser utilizado en la estabilización de desequilibrios transitorios de la balanza de pago de algún país miembro y la construcción de un mercado regional de capitales, en el que confluyan los excedentes de ahorro y las demandas de inversión que la región genere, como herramienta válida para la canalización de recursos existentes.” Una respuesta común, propia y coordinada al complejo escenario de mediano plazo que plantea el movimiento mundial de capitales.
Publicado en :
http://tiempo.elargentino.com/notas/triunfo-de-humala-consolida-eje-de-integracion-sudamericana
La respuesta del establishment frente al triunfo de Ollanta Humala se expresó en el derrumbe de más de 12 puntos en la Bolsa, ocurrida el lunes siguiente al ballottage. Si bien ese marco catastrófico fue rápidamente desmentido por la recuperación de los días subsiguientes, la Bolsa fue el terreno donde los sectores concentrados expresaron su repudio y buscaron condicionar el rumbo del gobierno. Ollanta Humala logró derrotar, ajustadamente, a Keiko Fujimori, hija del emblema neoliberal peruano de los ’90 y fiel representante de aquellos intereses. Más allá de la incertidumbre sobre el impacto en su política interna frente a las presiones y el lobby que pudiera sufrir, Humala se identifica con los presidentes que configuran un bloque nacionalista, popular y socialdemócrata. Su triunfo, entonces, produce un desbalance de fuerzas en la geopolítica sudamericana, que aísla los gobiernos orientados a un desarrollo a partir del establecimiento de relaciones bilaterales con los Estados Unidos y los organismos financieros internacionales. Así, el verdadero triunfador en la segunda vuelta peruana podría haber sido el bloque compuesto por Brasil, Venezuela, la Argentina, Ecuador, Paraguay y Uruguay, lo que podría colaborar en la integración regional. Para dar una señal inequívoca de las prioridades del próximo gobierno, el futuro mandatario anunció una gira de reuniones con los presidentes de los países miembros del Mercosur, que ya comenzó el jueves en Brasil, y que llegará a nuestro país el martes 14. HERENCIA MALDITA. El país andino es una de las economías de la región que, en el marco de la crisis financiera internacional, han experimentado un crecimiento récord propio de las naciones “emergentes”. En este caso, sin embargo, ha sido sobre la base de un modelo neoliberal que usufructuó el boom en los precios de los metales preciosos (siempre beneficiados en época de crisis) pero sin desenvolver una política de desarrollo del mercado interno ni de integración regional.Su crecimiento, que a nivel de las exportaciones fue de un 32,3% entre 2009 y 2010 (muy por encima del 20% mundial), debido a la ausencia del Estado, no se tradujo en una mejora del empleo registrado (apenas el 20% de la población) ni de la distribución de la riqueza. Consultado por Tiempo Argentino sobre el escenario abierto por la elección peruana, Roberto Feletti, viceministro de economía y presidente del Grupo de Trabajo de Integración Financiera de la UNASUR (GTIF), se mostró optimista y cauto: “Tengo simpatías por lo que escuché de la plataforma de Humala durante la campaña, pero hay que esperar a ver cómo avanza en su gestión.” De todas formas, aseguró que “la lección que queda del comicio es que el crecimiento económico por sí mismo no genera inclusión social. Por eso es tan importante el modelo argentino, que ata de manera indisoluble crecimiento e inclusión.”Humala prometió financiar un plan social con el modelo de la Asignación Universal por Hijo de Argentina y el plan Bolsa Familia del Brasil elevando la alícuota del impuesto a la minería para su financiamiento. GANA UNASUR. El viernes pasado, de no ser por el impacto de las cenizas volcánicas que impidieron su llegada, se iba a reunir el Consejo de ministros de economía y presidentes de los bancos centrales de los doce países miembros de Unasur para formalizar en resoluciones concretas los lineamientos en los que viene trabajando desde el año 2007. Según fuentes del Palacio de Hacienda el cónclave se reprogramará para los próximos días. El inesperado desplante de la naturaleza no malogró la reunión técnica del GTIF que el jueves aprobó el Plan de Acción para la consideración del Conseo que propone los ejes para trascender, a nivel económico, los acuerdos políticos ya alcanzados.Las recomendaciones incluyen propuestas para “la expansión de un sistema multilateral de pagos asentado en el uso de las monedas locales; la coordinación de fondos financieros disponibles en plazos y tasas de interés mejores que las disponibles a fin de aplicarlos a proyectos de desarrollo e integración; la implementación de un mecanismo regional de coordinación de reservas que podría ser utilizado en la estabilización de desequilibrios transitorios de la balanza de pago de algún país miembro y la construcción de un mercado regional de capitales, en el que confluyan los excedentes de ahorro y las demandas de inversión que la región genere, como herramienta válida para la canalización de recursos existentes.” Una respuesta común, propia y coordinada al complejo escenario de mediano plazo que plantea el movimiento mundial de capitales.
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http://tiempo.elargentino.com/notas/triunfo-de-humala-consolida-eje-de-integracion-sudamericana
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