Por Fabián Pardón(Motor de Ideas / Febrero 11).
- “¿Por qué la gente pone el grito en el cielo cuando el Estado Venezolano nacionaliza el BBVA Venezuela…y no lo hace cuando el BBVA se queda con los pisos de la gente?…y además les siguen cobrando las cuotas de la hipoteca”. Se preguntaba un amigo español.
¿Qué cambia entonces?
¿Por qué se acepta como algo natural que un banco se quede con las propiedades de la gente y como algo antinatural que el Estado tome cartas en el asunto?
La realidad es una sola, aquí, en España o Venezuela. Los intereses del BBVA son los mismos en todos los países donde tiene sucursales.
¿Por qué no cierra la lectura que hacemos de la realidad?
¿Por qué el sistema capitalista, ante la crisis rescata a los bancos y no a la gente?
“Cuando eso pasa es que algo está mal entre el mundo y yo” dice otro amigo.
Hay algo en el discurso hegemónico que no me cierra.
Los genocidas hoy, por obra y magia del sistema capitalista se reconvierten de: “Grupos de Tareas” durante el imperio del Terrorismo de Estado a “Empresas de Seguridad S. A.” en Democracia.
¡Y de algo hay que vivir! -dicen los mismos que se horrorizan con la nacionalización de los bancos. ¿Sino quien nos va a proteger de la inseguridad? – repiten desde los barrios privados.
Qué tiempos aquellos los del auge de los countries, con nombres apacibles como “Los Corrales, barrio privado” protegidos por empresas con nombres que transmiten seguridad como “Lupus Seguridad Privada S. A.”
Y así estamos por dejar al Lobo a cargo de las ovejas.
Hay un discurso que personalmente no me representa, y con él toda la industria del miedo y su cultura de odio, racismo y xenofobia.
Los argentinos nunca fuimos Europeos y ahora que el espejo en quenos mirábamos trocó en espejismo, esta todo más claro.
Está cambiando la mirada de las cosas.
La realidad estaba toda ahí.
Publicado en :
http://www.motorideas.com.ar/editorial/la-otra-mirada/509
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